Si bien ayer a la noche Boca quedó eliminado de la Copa Libertadores traer caer por penales en el partido de vuelta por los octavos de final entre Atlético Mineiro en un nuevo encuentro en el que el VAR volvió a ser protagonista, el plantel argentino debió aguardar más de doce horas en la puerta de la comisaría brasileña a raíz de los incidentes en las instalaciones del Estadio Mineirao, protagonizados por integrantes de la delegación visitante, la Policía y dirigentes del Galo.
El plantel del conjunto de la ribera pasó toda la noche arriba de los micros en la puerta de la comisaría, en donde se labraron actas y otros trámites vinculados a la pelea registrada en el estadio. Al menos siete integrantes de la delegación fueron señalados por la gresca, lo que derivó en la reprogramación del vuelo para las 15 de este miércoles (en un principio estaba pactado para las 2 de la mañana).
A más de 12 horas del hecho, Boca Juniors emitió un comunicado oficial sobre lo acontecido en Belo Horizonte con un tono muy duro: “Hoy nuestros socios, hinchas, jugadores y cuerpo técnico han sido perjudicados de forma alevosa, interpretando de manera maliciosa e intencionada la tecnología VAR”.
La carta que difundió el club, que llevó la firma del presidente Jorge Amor Ameal, indicó que lo ocurrido dejó “en manifiesto el manejo tendencioso de nuestro fútbol continental” y advirtió: “Lo acontecido marca un hecho sin precedentes, por ser el único caso en donde ganando los dos partidos de la serie un club queda eliminado de la competencia”.
Mientras el plantel se prepara para regresar al país, el comunicado fue contundente también con la directiva del Mineiro a quienes acusaron de “fogonear con expresiones violentas y amenazantes durante varios días” la previa del duelo. “Una vez más hemos sido perjudicados por decisiones que poco tienen que ver con lo deportivo y mucho con el manejo arbitrario de una competición que no lo merece”, indicó el texto, que también aseguró que la delegación no rompió la burbuja sanitaria.
EL COMUNICADO DE BOCA
El Club Atlético Boca Juniors, institución de 116 años de historia, sufrió en esta serie de Copa Libertadores ante Atlético Mineiro dos fallos inexplicables anulando goles lícitos que destruyeron el espíritu deportivo del torneo más prestigioso del continente.
Hoy nuestros socios, hinchas, jugadores y cuerpo técnico han sido perjudicados de forma alevosa, interpretando de manera maliciosa e intencionada la tecnología VAR.
Lo acontecido marca un hecho sin precedentes, por ser el único caso en donde ganando los dos partidos de la serie un club queda eliminado de la competencia.
Situaciones como las vividas en las últimas jornadas dejan en manifiesto el manejo tendencioso de nuestro fútbol continental.
Tampoco podemos dejar pasar el hecho que desde la máxima autoridad del Club Atlético Mineiro se fogoneó con expresiones violentas y amenazantes durante varios días hasta llegar a los lamentables hechos en los que fueron damnificados físicamente nuestros jugadores, cuerpo técnico y dirigentes, quienes tuvieron que estar demorados por más de 12 horas en situaciones lamentables con el fin de no romper la burbuja sanitaria.
Una vez más hemos sido perjudicados por decisiones que poco tienen que ver con lo deportivo y mucho con el manejo arbitrario de una competición que no lo merece.
Jorge Amor Ameal
Presidente del Club Atlético Boca Juniors
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