Ángel Di María tuvo su partido consagratorio y marcó el tanto del 1-0 en la final de la Copa América disputada entre Argentina y Brasil en el estadio Maracaná. Fue al minuto 22 del primer tiempo cuando quedó cara a cara con Éderson y no dudó en colocar la pelota por encima de su humanidad, luego de un pase largo de Rodrigo De Paul y el fallo de Renan Lodi.
A los 36 del primer tiempo en el Maracaná y en uno de los mejores momentos de la Selección en el partido, Di María volvió a generar peligro como extremo derecho y estuvo cerca de desnivelar. Sin embargo, llegó mal pisado al área rival, trastabilló y perdió el balón. Brasil quiso salir jugando rápido el saque de arco pero el árbitro uruguayo Esteban Ostojich detuvo la acción porque parecía que el jugador del París Saint Germain se había lesionado de gravedad.
Todos creyeron que, o había tenido un problema en su tendón izquierdo o había sufrido un esguince de tobillo. Los auxiliares médicos albicelestes se apresuraron para atenderlo y el Fideo, muy lentamente, se recompuso. De hecho en el cuerpo técnico argentino mandaron a calentar a Nicolás González, atentos al estado y la gravedad de su dolencia. No obstante se repuso y continuó no solamente el resto de la etapa inicial sino gran parte del complemento. A falta de 11 minutos para el final, fue reemplazado por Exequiel Palacios en una triple variante realizada por Lionel Scaloni.
Pero el rosarino no fue solamente un gol y nada más, porque Scaloni le dio la titularidad para que marcara la diferencia en la ofensiva pero también para que ayudara en el retroceso, tal como hizo Nico González en los encuentros pasados. Y él cumplió: tuvo entrega, despliegue y fue una preocupación constante para toda la línea defensiva verdeamarelha, que sin lugar a dudas sufrió horrores cada vez que tocó la pelota él o Lionel Messi.
“Es difícil de entender, ¿con 32 años estoy viejo?”, había sido su explosiva declaración en septiembre de 2020, cuando el entrenador lo había dejado afuera de una convocatoria. Claro, sentía que jugando en uno de los elencos más importantes del mundo como el PSG, por jerarquía e historia con la camiseta blanca y celeste, merecía seguir formando parte de este nuevo ciclo siendo uno de los más experimentados junto a Messi y Nicolás Otamendi. Lo reclamó, hizo méritos en cancha y fue incluido para esta Copa América en la que fue muy importante. En primera medida ingresando en los minutos finales de cada cotejo. Y esta noche, siendo otra vez jugador titular.
En agosto de 2008, el equipo dirigido por Sergio Batista le ganó la final del torneo masculino de fútbol en los Juegos Olímpicos de Beijing a Nigeria. El autor del tanto fue Ángel Di María, el mismo que rompió el cero en el estadio Maracaná en la final de la Copa América 2021. Con una idéntica definición, el Fideo replicó la obra e hizo delirar nuevamente a la Albiceleste. Hoy fue el partido de su redención. Hoy Ángel Di María dejó atrás todo tipo de frustraciones, karmas con lesiones en finales y discusiones sobre sus convocatorias. Hoy Ángel Di María escribió la página más dorada de su carrera y una de las más importantes de la selección argentina.
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