Luego del partido que Brasil le ganó 1-0 a Perú por la primera semifinal de la Copa América, Neymar brindó su testimonio donde analizó la victoria del Scratch que clasificó a la final del próximo sábado. Sin embargo, lo más llamativo fue el pedido del crack brasileño, quien también se ilusionó con un partido frente a la Argentina en el encuentro decisivo del certamen. “Quiero jugar contra Argentina, porque tengo amigos ahí. Pero en la final gana Brasil, je”, expresó el emblema de Brasil en pleno campo de juego.
Fue un triunfo justo del equipo local, más allá de que no pudo hacer pesar de gran manera sus individualidades y la superioridad marcada que tiene sobre el conjunto inca. Repitió el mismo resultado del cotejo por los cuartos de final donde dejó en el camino a Chile. No obstante, eso le alcanzó al actual campeón del certamen para plasmar la clasificación a la final.
Si bien no se trató de un encuentro cargado de polémicas, solo una por una supuesta mano dentro del área de Thiago Silva, el “10″ brasileño le tiró un dardo al árbitro del partido, Roberto Tobar. “No puede hablar como lo hace. Una falta de respeto con todos los jugadores. Cómo le habla a los jugadores, cómo te mira. Fui a hablar un minuto con él y es muy arrogante y a los dos equipos nos trató mal. Él puede errar, es parte del partido, pero la arrogancia que tuvo hoy no es para una semifinal de la Copa América”, lanzó Ney.
También se refirió a su compañero Lucas Paquetá, que convirtió su segundo tanto seguido y ambos les dieron las últimas victorias a su equipo. “Es un gran jugador, viene creciendo en cada partido. Cada juego que viene haciendo con la selección, la buena temporada que hizo en su club y acá viene demostrando que es muy importante para la selección brasileña, con su participación, con su juego, lo hizo muy bien y siempre aparecen grandes jugadores para la selección”.
Neymar volvió a ser importante, una constante en el equipo verdeamarelo. Por ahora lleva convertidos dos tantos, uno de ellos de penal, pero contribuyó mucho en el juego con asistencias, pases, gambetas y los lujos que siempre están a la orden del día.
El equipo de Tite sigue con su buena senda y buscará su segundo título desde que asumió en 2017. En este certamen ganó cinco partidos, los últimos dos por la mínima, y sólo empató uno, ante Ecuador en la última jornada del Grupo B.
El rendimiento del Scratch fue de mayor a menor donde arrancó con sendas goleadas ante Venezuela (3-0) y Perú (4-0), luego venció con lo justo a Colombia (2-1) e igualó con Ecuador (1-1). Aunque no se florea, demuestra una solidez colectiva que por ahora alcanza para soñar con el bicampeonato sudamericano.
Brasil consiguió el pase a la final y volverá a jugar en el Maracaná como lo hizo en 2019. El del sábado a las 21:00 horas, será la tercera en este milenio del Canarinha donde ya ganó las anteriores, ambas frente a la Argentina: en el certamen jugado en Perú en 2004, tras el empate 2-2 ganó por penales y luego en Venezuela 2007, donde tras venció por 3-0.
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