Regresó Andy Ruíz a los cuadriláteros y lo hizo con 20 kilos menos para derrotar al veterano Chris Arreola, quien le puso el escenario complicado e incluso lo mandó a la lona en una ocasión; sin embargo, el Destroyer se impuso en las tarjetas y volvió a ganar por decisión unánime.
A los pies del cuadrilátero y en primera fila se encontraba el que podría ser el próximo rival del mexicoamericano en su camino rumbo a una pelea por cetros mundiales. Se trata de Luis Ortíz, otro pugilista veterano pero con un récord que impacta a cualquiera que se le ponga en frente.
Tras finalizar el combate, el boxeador cubano retó públicamente a Andy en busca de un combate que haga vibrar algún cuadrilátero de Estados Unidos: “Felicitaciones para Andy Ruiz. Ahora, ‘King Kong’ está esperando justo aquí. Tiene la oportunidad de enfrentarse conmigo y esperaré su decisión”, mencionó para FightHype.
Luis Ortíz, apodado “The Real King Kong”, es un boxeador originario de Camagüey, Cuba y nació en el mes de marzo de 1979. Cumplió 42 años este 2021 y su imponente físico ha hecho que ganara su popular apodo, pues presume una estatura de 1.93 metros y en su último combate alcanzó las 241 libras, unos 109 kilogramos de peso.
A pesar de su físico, el contraste con Andy Ruíz no sería tan radical, pues el Destroyer mide 1.88 metros y en su pelea contra Chris Arreola la báscula arrojó un peso de 256 libras, unos 116 kilogramos, con los que haría frente al cubano.
En cuanto a la experiencia, a pesar de tener 42 años de edad, Ortíz apenas registra 36 peleas profesionales -las mismas que Ruíz- cuya diferencia es de 11 años más que el mexicano, en las que presume un récord de 32 victorias, dos derrotas y dos peleas anuladas.
“The Real King Kong” solamente ha perdido en dos ocasiones y ambas ocurrieron ante el mismo rival. Deontay Wilder fue su verdugo en 2018 y 2019, años en los que firmaron combates por el título del Consejo Mundial de Boxeo (CMB) en los pesos pesados.
En ambas peleas, “The Bronze Bomber” alzó los brazos por nocaut y se mantuvo invicto, poniendo fin a la discusión por ser el siguiente rival de Tyson Fury en la categoría.
A pesar del buen récord que posee el pugilista cubano, las polémicas lo han seguido de cerca y su reputación se vio seriamente afectada. En 2017 falló en una test antidrogas previo a su primera pelea contra Deontay Wilder, por lo que fue suspendido y tuvo que reprogramar el combate.
El problema de Ruíz aquel año radicó en una reincidencia, pues en el 2014 también había dado positivo a pruebas por esteroides anabólicos; sin embargo, en reiteradas ocasiones ha mencionado que su problema de 2017 fue debido a una receta médica para controlar su alta presión arterial.
Aunque fue sancionado por un año desde la Asociación Mundial de Boxeo (AMB) y que el Consejo Mundial de Boxeo (CMB) también le impuso una multa por USD 25,000, el pugilista obtuvo su esperada pelea contra Deontay Wilder en marzo de 2018, seis meses después de la suspensión.
Ante la posibilidad de que Andy Ruíz se mida ante Luis Ortiz, el peleador mexicano afirmó después de vencer a Chris Arreola que “una pelea contra Ortíz sería emocionante”, pero dejó en claro que debe seguir con su preparación y corregir errores.
Mientras tanto, la última pelea que tuvo “King Kong” ocurrió en noviembre de 2020 ante el estadounidense Alexander Flores, a quien derrotó en apenas 45 segundos del primer round y que lo catapultó de nuevo a peleas estelares.
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