En la última jornada del futbol mexicano, los equipos de la mitad inferior de la tabla general se juegan sus últimas oportunidades para ingresar a la zona de repechaje. En el Estadio León, los Gallos Blancos de Querétaro visitaron a los campeones vigentes del torneo. Aunque estaban obligados a ganar para tener oxígeno en el torneo, los locales se fueron al frente en el marcador desde el primer tiempo. Sin embargo, una jugada de pena máxima en favor de la Fiera marcó el rumbo del partido.
Los visitantes, ubicados en el lugar número 13, se lanzaron al frente desde el primer minuto. Por otro lado, el equipo con la afición en su favor buscó las oportunidades que lo metieran a la zona de clasificación directa. Con el ímpetu mutuo, los dos equipos buscaron hacerse daño, pero el parejo desempeño les impidió marcar gol en los primeros minutos.
No fue sino hasta el minuto 36 que un error defensivo de los queretanos le dio la oportunidad a los panzas verdes de abrir el marcador. El goleador Ángel Mena llegó hasta la línea de fondo y mandó un centro con destino a los compañeros que ya lo esperaban en el área. Alexis Doldán, el defensor que lo acompañaba en la carrera interfirió con la trayectoria del balón, al estirar la mano y desviar la trayectoria. El silbante no dudó en marcar la pena máxima.
Aunque la jugada fue revisada en el VAR y el contacto no fue intencional, bajo el criterio de sancionar cualquier mano en el área, se ratificó la decisión. El encargado de cobrar el disparo fue Mena. Con su educada zurda, se perfiló y luego de encarrerarse, aseguró su disparo al centro. El arquero se lanzó sobre su costado izquierdo y cayó en el engaño. El ecuatoriano llegó a siete anotaciones en el torneo.
A pesar de tener al estadio y el marcador en contra, el Querétaro no bajó los brazos y continuó buscando jugadas de peligro a la ofensiva. El primer tiempo terminó sin más goles, por lo que la ventaja parcial para los locales alivió la expectación de los asistentes en el estadio y los jugadores en la banca.
Para el segundo tiempo, los Gallos insistieron en la búsqueda del tanto del empate. Sin embargo, una decisión arbitral determinó el rumbo del partido. Al minuto 60, el recién ingresado Joel Campbell se abrió espacio por la banda derecha. En ese momento Victor Dávila realizó un sprint y se desmarcó de su rival. Al observar su movimiento, el costarricense envió un centro de tres dedos hacia el área.
Pese a que el centro le quedó muy adelantado, el delantero chileno hizo el esfuerzo por recuperarlo. Sin embargo, tras encontrarse entre el arquero y el defensor que lo venía persiguiendo, se tiró al suelo y el árbitro marcó el penal. La jugada fue revisada en el VAR, donde se observó que el artillero de León se tropezó con su propio pie. No obstante, el árbitro recibió la instrucción de marcar la pena máxima sin la necesidad de asistir al monitor.
Una vez más, Ángel Mena se perfiló en frente del manchón de penal. En esta ocasión, dirigió su disparo hacia el lado izquierdo, pero el contrario realizó un movimiento diferente al penal anterior y se lanzó hacia la derecha. El delantero llegó a ocho anotaciones en el torneo y decretó las anotaciones totales en favor del León durante el partido.
Los Gallos siguieron adelante con el objetivo de anotar tres goles en los 27 minutos restantes para darle la vuelta al marcador. De hecho, en una jugada magistral, lograron acercarse tres minutos después de la jugada del penal. Un tiro libre en favor de la visita, colocó el balón en el área. El servicio fue mal impactado, por lo que la pelota quedó en el aire.
Antes de que se fuera por el costado, Ángel Sepúlveda lo dejó botar una vez. Cuando se elevó lo suficiente de nuevo, tiró su cuerpo hacia atrás y, con una chilena, sacó un centro que fue rematado por Alexis Doldán. Aunque la jugada fue digna de ovación, el marcador de 2-1 no se movió más y resultó insuficiente para conseguir el objetivo del encuentro.
Tras los 90 minutos reglamentarios más el tiempo agregado, los Gallos tuvieron que lidiar con la derrota y con su eliminación de la zona de repechaje. Sus 21 puntos los dejaron en la misma posición con la que arrancaron el encuentro. Por otro lado, León se ubicó en la cuarta posición de forma provisional. En caso de que Monterrey y Santos pierdan sus encuentros, se podrían convertir en el último equipo que acceda de forma directa a la Liguilla.
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