Hace poco más de un mes que Jorge Sampaoli aterrizó en Francia para asumir al frente del Olympique Marsella y tras cinco partidos hay métodos y formas del entrenador que ya han llamado la atención de los fans y de la prensa. Es por eso que en conferencia de prensa, fue consultado sobre por qué no puede parar de moverse durante los encuentros de su equipo.
“Lo hago desde siempre. Pienso en movimiento, es personal. Y hoy ven una versión muy tranquila de lo que he sido en el pasado. No pienso que sea posible corregirlo ahora”, señaló el antiguo técnico de la selección argentina, quien se muestra muy tranquilo en las ruedas de prensa, pero cambia de cara en los partidos, durante los cuales se la pasa caminando sin parar en el espacio reservado para los técnicos.
“Me implico mucho. Y analizo mejor caminando. ¡Como Nietzsche!”, añadió con una gran sonrisa, en referencia al filósofo alemán que dijo: “Solo los pensamientos que vienen caminando valen algo”.
Lo cierto es que más allá de que su manera de vivir los encuentros llame la atención, su método hasta el momento ha resultado. El equipo de Marsella llevaba una victoria en sus últimas 11 presentaciones antes de la asunción de Sampaoli y ahora, al mando del argentino, solo perdió uno de sus cinco duelos y tres de ellos fueron victorias, por lo que se ubica sexto en la tabla de posiciones, en la puja por un lugar en la zona de clasificación a la próxima Europa League.
Tras su llegada al equipo francés, el ex técnico del Sevilla y del Atlético Mineiro había hablado sobre su admiración por Bielsa, otro entrenador que suele ver los partidos de manera inquieta: “No quiero intentar ser Bielsa o parecerme a él. Voy a intentar a mi manera modificar las cosas muy rápidamente. Creo que algunos ídolos, en algunos lugares, son imposibles de imitar”.
“Es un proyecto del presente. No me interesa que se me recuerde, quiero ayudar a enderezar una situación difícil y a devolver la alegría y la esperanza a los aficionados. Estoy totalmente dedicado a eso”, había señalado Sampaoli.
Eliminado en la Copa de Francia y fuera de la zona de clasificación a certámenes internacionales, el Marsella atraviesa una temporada catastrófica, también marcada por los incidentes violentos en el centro de entrenamiento del club y el relevo del presidente Jacques-Henri Eyraud. El oriundo de Casilda llegó tras la salida de André Villas-Boas, sustituido durante un mes por Nasser Larguet, el director del centro de formación del OM.
SEGUIR LEYENDO:
Con información de AFP