Uno de los exponentes del fútbol mexicano es Jorge Campos Navarrete, quien a lo largo de su trayectoria se caracterizó por ser un jugador versátil y carismático dentro de la cancha. Fue conocido en todo el mundo como el portero que jugaba de delantero, alcanzó un reconocimiento internacional pese a solo jugar en clubes mexicanos.
El Brody se retiró del fútbol profesional en el año 2003; sin embargo, no dejó de practicar este deporte, ya que en julio de 2011 jugó contra Leonel Messi en un juego de leyendas. A pesar de que ya tenía ocho años fuera de las canchas, demostró su nivel futbolístico y realizó diversas atajadas que sorprendieron al público.
El juego se desarrolló bajo la idea de ayudar a niños con enfermedades terminales, Messi invitó a sus amigos de la cancha para enfrentar a las figuras del mundo. El encuentro se llevó a cabo en la capital mexicana: el estadio Azul presenció uno de los partidos más importantes del fútbol.
El equipo de “Messi and Friends” estuvo conformado por Roberto Abbondanzieri, Pablo Quatrocchi, Diego Alfredo Lugano, Ismael Quílez, Jhon Viáfara, Walter Alejandro Gargano, Álvarez, Ariel Ortega, Romario, Martín Palermo y Messi.
Mientras que el equipo de “Estrellas del Mundo” estuvo conformado por Jorge Campos, Néstor Ortigoza, Esteban Fuertes, Jared Borgetti, Christian “Chaco” Giménez, Edgar Davids, Mauro Camoranesi, Francisco Javier “Luna” Aguilera, Gerardo Torrado, Beltrán y Osvaldo.
En aquel partido, Campos se llevó las palmas del público y atajó algunas llegadas de la figura argentina, a pesar de que jugó la primera parte del partido, El inmortal opacó a Messi por sus sorprendentes atajadas.
Desde los primeros minutos de juego, Campos defendió su arco. En el minuto seis tuvo que salir de su área y acercarse para achicar la jugada que el equipo rival amenazaba, con una barrida limpia despojó el balón de los píes del delantero.
Para el minuto siete nuevamente salió el acapulqueño a manotear un balón que mandó a tiro de esquina. El ex seleccionado nacional tuvo que recorrer el arco y cuando brincó para despejar el balón lo hizo con mano cambiada, es decir que en lugar de usar la palma de la mano izquierda cambió y optó por la derecha.
Las inclemencias de aquel día causaron una lluvia que incomodó la fluidez del juego, a pesar de ello, La leyenda del arco consiguió que los fanáticos mexicanos enloquecieran con su actuación. Uno de los momentos claves del partido fue cuando Jorgito tuvo un mano a mano con La Pulga y logró detener el tiro del argentino.
Con una lectura anticipada de la jugada, Jorge Campos adelantó su salida y obligó a Messi a apoyarse con Ortega quien mandó una bolea, con la agilidad del ex jugador de Pumas corrió y alcanzó a detener el disparo.
La tribuna aclamaba al portero del equipo de las “Estrellas del Mundo”: en el minuto 28 Leonel había encarado a Jorge Campos, el delantero argentino había logrado rebasar a la defensa de las estrellas, el único rival que le quedaba era el arquero. Se perfiló para tirar, Campos estuvo siempre atento a los movimientos de La Pulga y con un recostón al poste derecho el mexicano detuvo el esférico.
Los primeros 45 del partido terminó con un marcador empatado a dos goles, El inmortal salió de la cancha entre aplausos y ovaciones que cantaban “portero, portero”. Para la parte complementaria ya no jugó y observó el encuentro desde la banca.
Al finalizar el encuentro intercambió abrazos y algunas palabras con la leyenda del fútbol argentino, se abrazaron. Fue así como terminó el encuentro amistoso, al final el equipo de Messi and Friends se llevó el juego con un marcador de 5 - 4.
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