A principios de marzo, el serbio Novak Djokovic rompió un récord histórico al convertirse en el jugador que más semanas ha estado como número uno del mundo en la historia, una marca que estaba en posesión de Roger Federer.
Tras permanecer durante 311 semanas como líder del ranking masculino de la ATP (El suizo estuvo 310), los medios serbios informaron que el tenista decidió montar una fiesta con su entorno para celebrarlo e iba a ser allí, donde se ideó un plan para dañar su imagen que finalmente no se llevó a cabo.
Así lo reveló la revista de espectáculos serbia Svet&Scandal recientemente, después de que una fuente asegurara al medio que desde Inglaterra se contrató a un hombre de mucho dinero para que se encargara de ese trabajo, el cual consistía no solo en ensuciar su carrera deportiva sino también su matrimonio.
La intención, según relató el magazine, era convencer y contratar a una modelo para que lo seduzca en esa reunión y grabara cualquier encuentro íntimo que tuvieran con la intención de difundir posteriormente esas imágenes.
“Es cierto que un tipo me contactó. Lo conozco de la ciudad y lo consideraba un tipo serio. Conozco sus trabajos y estuvieron bien. Cuando me pidió una cita, pensé que era para un asunto comercial. Sin embargo, a medida que avanzaba la conversación, vi que no tenía nada que ver con mi vida”, aseguró Natalija Scekic a Svet&Scandal días después de aquel festejo.
“Pensé que se trataba de una cámara oculta cuando me dijo que tenía que seducir a Novak y grabarlo, pero que no me preocupase de eso porque él ya se ocupaba de esas cosas. Me dijo que podía conseguir unos 60.000 euros por eso y un viaje adonde yo quisiera”, reveló la modelo que se negó rotundamente a participar en esa desagradable propuesta.
“Me reí, esperando que dijese que era una broma, pero el hombre hablaba muy en serio. Me sentí muy ofendida y humillada”, se lamentó y agregó: “Sé que dicen que las modelos son de una forma u otra, pero todo el tiempo traté de hacerme un nombre en este negocio sin manchas, para que alguien me dijera literalmente que tengo que acostarme con alguien por dinero...”.
“En ese momento se me ocurrió pegarle, echarle agua, pero me contuve porque estábamos en un lugar público. Recogí mis cosas y me fui”, detalló la mujer, que se había reunido para almorzar y escuchar la oferta.
“Espero que no haya encontrado una chica que quiera hacer eso porque no es justo para Novak. Es nuestro mejor embajador, un hombre ejemplar, de familia, como para que alguien le seduzca así por dinero, o al menos lo intente”, sentenció.
Djokovic está casado con Jelena Ristic desde julio del 2014, aunque su romance comenzó desde el colegio primario. Hoy, seis años después de aquella lujosa boda, conformaron una familia junto a sus dos hijos Tara y Stefan.
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