A pesar de haber tenido una buena actuación en el plano defensivo, la actuación de Facundo Campazzo el jueves por la noche tuvo un sabor agridulce. El cordobés falló el triple del final, que pudo haberle dado la victoria a los Denver Nuggets. Terminó perdiendo 110 a 112 ante los Washington Wizards.
Más allá de no haber podido convertir el tiro decisivo en los últimos segundos del encuentro, el base tampoco tuvo un gran rendimiento en la ofensiva: en los 32 minutos que estuvo en cancha, hizo 5 puntos, dio dos asistencias, realizó dos bloqueos y se quedó con tres rebotes.
Esta acción fue un tema muy comentado y su compañero Michael Porter Jr. reconoció que quizás fue un error lanzar el triple para ganar el partido, teniendo en cuenta que podrían haberlo igualado fácilmente ya que eran cuatro jugadores con dominio completo de la escena: “Miré la jugada después. Uno de nosotros podría haber cortado fácilmente. Honestamente, podría haber cortado y hacer una volcada. Pero estábamos pensando: uno de nosotros va a obtener un triple. Si el tiro entra, nadie está hablando de eso”.
Antes de fallar esta acción, Campazzo había sido clave para mantener con vida a su equipo: con el partido 112-110 y 53 segundos en el reloj, salvó una pelota épica que le permitió a los suyos retomar la posesión y tener chances de ir por la victoria.
La primera participación de Campazzo en el Ball Arena fue cuando ingresó sobre el final del primer cuarto, pero en esos minutos no pudo lucirse demasiado. Ya en el segundo cuarto, apareció para darle un pase preciso y lleno de técnica al esloveno Vlatko Čančar, que a su vez asistió al alemán Isaiah Hartenstein para que anotara dos puntos. Sin embargo, la primera mitad del encuentro terminó 56-54 a favor de Washington.
Después de errar tres lanzamientos de campo, el cordobés logró anotar sus primeros dos puntos a través de un tiro libre que consiguió cuando faltaban por jugar 7 minutos y 38 segundos de ese período. Luego, el argentino completó con un triple que le dio una ventaja parcial a los Nuggets.
En la segunda parte del juego, Denver logró igualar el marcador, principalmente gracias a la potencia del serbio Nikola Jokić y las habilidades del canadiense Jamal Murray, y ambos equipos terminaron el tercer cuarto con 88 puntos.
Sin embargo, en el último tramo el conjunto dirigido por Michael Malone no pudo resistir los ataques de los visitantes, que pasaron nuevamente al frente de la mano de Bradley Beal y Russell Westbrook.
En el cierre del encuentro, Murray, fuertemente marcado, decidió descargar sobre Campazzo, quien recibió el balón y se quedó con la posibilidad del triunfo en sus manos. Sin embargo, lanzó incómodo y falló el triple que hubiera cambiado el resultado final.
El partido terminó 112 a 110 con victoria para Washington, que de esta manera comenzó a recuperarse y quedó en el puesto 12 de la Conferencia Este. En tanto, los Nuggets cayeron un puesto en la Conferencia Oeste y se encuentran octavos.
“Llegué a un lugar diferente y sabía que había que adaptarse y sigo intentándolo lo más rápido. Hace 4 meses estaba jugando en otra liga, otro país y de un día a otro un cambio de 360 grados. Sabía a qué venía y que iba a llevar su proceso, pero me siento con la confianza y estoy conociendo a mis rivales y la NBA”, indicó el ex Real Madrid de España y UCAM Murcia, durante una entrevista por zoom que brindó a varios medios.
El base explicó que se sintió “mejor” al competir contra los equipos a los cuales enfrentaba “por segunda vez” y aseguró que “cada día que pasa” se siente “mejor” en los Nuggets, aunque reconoció que “son compañeros diferentes y una manera diferente de jugar”.
Por otro lado, el argentino, que tuvo sus inicios en Municipal de Córdoba, se refirió a cómo es la relación con el entrenador principal, Michael Malone, y reconoció que “es muy cercano al jugador y siempre está pendiente”.
“Es uno de esos entrenadores como Sergio (Hernández) o Pablo (Lasso), está atento a si tenemos una sugerencia o disponible en su oficina y hay buena relación entre ambos. Es importante la cantidad de partidos, pero él siempre me indica que siempre debo ser Facundo Campazzo y no otro jugador. Obviamente la adaptación no era fácil, pero siempre me sentí respaldado por mis compañeros y ellos me dan confianza”, agregó.
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