Extravagante como pocos, Conor McGregor volvió a presumir con sus nuevas joyas. El luchador irlandés de artes marciales mixtas lució sus dos nuevos relojes por los que gastó más de tres millones de dólares (2.230.000 de libras esterlinas), según informó The Sun. El paquete incluyó un traje personalizado que lleva sus iniciales. Todo en la previa al próximo UFC 257 donde el 23 de enero se medirá ante el estadounidense Dustin Poirier, en el Fight Island de Abu Dhabi
En su cuenta de Instagram, The Notorious, como se lo conoce, mostró sus nuevos chiches que se suman a su colección de relojes millonarios. Trascendieron algunos detalles. Uno es un Astronomia Tourbillon Baguette de Jacob & Co, valuado en un millón de dólares (730.000 libras esterlinas). Es tan exclusivo que solo se hicieron nueve copias en el mundo.
Se asienta sobre una base de 342 diamantes y se mueve un tourbillon de tres ejes. Luego tiene otros 80 diamantes en las asas. Con cristal de zafiro abombado, los tornillos están pulidos a mano y se emplea en los materiales titanio y aluminio lacado. La caja es de oro rosa de 18 quilates, con unas dimensiones de 50 milímetros de ancho y 25 milímetros de grosor, siendo que recoge el calibre de cuerda manual.
El otro reloj es un Rasputin Tourbillon Erotic Jacob & Co, cuyo costo ronda los dos millones de dólares (1.500.000 libras esterlinas). Sobresale la imagen de una pareja teniendo sexo.
No son los primeros relojes de Jacob & Co que el británico adquiere a la casa del magnate uzbeko Jacob Arabo, pues hace unos meses dio a conocer el Astronomia Casino, otra pieza singular, aunque de un precio algo inferior. El Astronomia Tourbillon Baguette, salvando la cuestión del gusto estético, es una obra maestra de la ingeniería relojera.
El tema no terminó acá. También mostró orgulloso su nuevo traje personalizado que lleva sus iniciales. Además, condujo su nuevo Bentley descapotable y fue acompañado de su hijo.
Según Forbes, McGregor tiene un patrimonio neto estimado en 99.000.000 de dólares. A sus 32 años volverá a subirse al ring y mientras tanto no escatima en gastos para darse todos los gustos.
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