“¿Es una broma? ¡Esto es extraordinario! Es una salsa diferente en este momento. Estos dos hombres están jugando en un nivel fenomenal”. El narrador en inglés del duelo entre Diego Schwartzman y Denis Shapovalov por la semifinal del Masters 1000 de Roma, enloqueció luego del peloteo que merodeó los 40 segundos de máxima tensión, en el que Peque, con el encuentro igualado 4-4 en el último set, dio un golpe de efecto en la moral de su adversario durante el primer enfrentamiento entre ambos. Tras rescatar la pelota dos veces ante sendos potentes passing shots del canadiense nacido en Israel, y de luego verse contra las cuerdas ante la excursión de Shapovalov a la red, resolvió primero con un globo y luego con un impacto largo, que terminó con el argentino con los brazos en alto y el necesario espaldarazo de confianza.
El Peque, de 28 años, superó 6-4, 5-7 y 7-6 (7-4) a un difícil contendiente para alcanzar la final del certamen, en la que se medirá ante Novak Djokovic este lunes desde las 12 (hora argentina). Claro, no se trata de una misión imposible para Schwartzman, que en cuartos de final despachó ni más ni menos que a Rafael Nadal. Además, se convirtió en el primer argentino en llegar a una final de un Masters 1000 desde 2018, cuando lo logró Juan Martín del Potro.
En el contexto de un cotejo parejo, cambiante, con innumerables quiebres de servicio, el Peque debió oponer su talento ante los golpes pesados de Shapovalov. Tras un primer set en el que sostuvo el estado de gracia que traía del duelo ante el español Nadal (más allá de que lo pudo cerrar sacando 5-3), su adversario reaccionó, se puso sets iguales, y juntos regalaron un partido vibrante, que cambió de dominio en varias ocasiones.
Recién en el tie break, Peque tomó el control del juego hasta consagrarse finalista. Antes, caminó varias veces con la cornisa, cuando Shapovalov le quebró el saque y tuvo la chance en más de una oportunidad de materializar el break. Pero allí surgieron el talento del argentino y los errores de su contendiente, en una puja que contó con momentos calientes, como cuando el representante albiceleste reclamó porque Denis hablaba en ruso con su coach Mijaíl Youzhny.
Pero una vez más se impuso y buscará la corona ante Djokovic, con quien se enfrentó en cuatro ocasiones en el circuito ATP y en todas ganó el serbio. La última vez que se cruzaron fue en Abierto de Australia de este año y Nole se impuso por 6-3, 6-4 y 6-4.
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