La novela por la ruptura entre Lionel Messi y el Barcelona transita de etapa de clímax. El astro argentino, de 33 años, no se presentó este domingo a realizarse el hisopado de cara a la vuelta a los entrenamientos del plantel luego de la decepción en la Champions League y en el inicio formal de la era de Ronald Koeman como entrenador.
Por el momento las partes están lejos de un acuerdo: el entorno del delantero asegura que se ampara en la cláusula de salida gratuita, mientras que el club culé asegura que la misma expiró el pasado 10 de junio, que el jugador tiene contrato vigente y que sólo podría partir a través de una venta. Si bien quienes acompañan a Messi en su carrera apuestan al diálogo para resolver la situación, desde la Liga de España salieron a respaldar a los blaugranas.
El ente que regula el fútbol español asegura que el capitán tiene una cláusula de rescisión y que no dará la baja federativa si no se abona dicho monto, que según el equipo blaugrana es de 700 millones de euros.
“El contrato se encuentra actualmente vigente y cuenta con una ’cláusula de rescisión’ aplicable al supuesto de que Lionel Andrés Messi decidiera instar la extinción unilateral anticipada del mismo, efectuada conforme al artículo 16 del Real Decreto 1006/1985, de 26 de junio, por el que se regula la relación laboral especial de los deportistas profesionales. En cumplimiento de la normativa aplicable, y siguiendo el proceder que corresponde en estos supuestos, LaLiga no efectuará el trámite de visado previo de baja federativa al jugador si no ha abonado previamente el importe de dicha cláusula”, reza el comunicado de la organización que preside Javier Tebas.
Mientras tanto, Manchester City, el interesado con más chances de quedarse con Messi, y PSG, Inter y Juventus, los otros equipos que dejaron trascender que siguen el caso con atención, aguardan agazapados los próximos pasos del culebrón. También sus hasta ayer compañeros; muchos de ellos con futuro lejos de la institución, como Luis Suárez (suena en Juventus y Ajax), Arturo Vidal (aparece en la órbita del Inter) e Iván Rakitic (cerca de cerrar su regreso al Sevilla).
Otros futbolistas estarían esperando la resolución detrás del souvenir de pasar a la historia a partir de un número simbólico. Según publicó el sitio 20 minutos, el atacante Martin Braithwaite habría expresado su deseo de utilizar el dorsal 10 del capitán si es que se confirma su despedida.
El danés, de 29 años, llegó a principios de año al Barcelona, que le pagó la cláusula de salida de 18 millones de euros al Leganés ante la lesión de Luis Suárez. Además, le hizo un contrato hasta 2024 y le fijó una cláusula de salida de 300 millones de euros.
Desde su llegada, ha disputado solo 403 minutos en los que marcó un único gol frente al Mallorca. Y según informó Mundo Deportivo, la dirigencia escuchó acercamientos de otros clubes para negociarlo (se habló de Everton y West Ham United, de la Premier League). Con Suárez declarado prescindible, nombres como Moussa Dembelé, Mermhis Depay, el uruguayo Maximiliano Gómez y Erning Haaland transcendieron como posibles reemplazantes. Una prueba de que tal vez Braithwaite no tenga tanto lugar en el imaginario de Koeman. Sin embargo, de quedarse, aseguran que quiere hacerlo a lo grande: con el N° 10 con el que Messi hizo historia.
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