La madrugada de este jueves, las oficinas corporativas de Cruz Azul en Gran Sur han sido tomadas por la policía de Ciudad de México con el fin de cumplir una orden girada por un juez en la que se ordena entregar las instalaciones al Consejo de Administración como parte de las investigaciones del caso Billy Álvarez.
La orden del juez dispone que además deberán ser entregados bienes, maquinaria y equipo que se encuentre en las instalaciones. A los empleados que iban a trabajar esta mañana en la cooperativa se les impidió el acceso, según el diario ESPN.
El allanamiento policial ocurrió un día después de que los socios opositores, en compañía del abogado Guillermo Barradas, intentaron entregar la carta de dimisión de Billy Álvarez de la Cooperativa en las oficinas corporativas de Cruz Azul: el personal del club se negó a recibirla y ni siquiera autorizaron el acceso de los socios opositores.
Algunos cooperativistas de Cruz Azul pusieron resistencia en un principio y se negaron a darle acceso a las autoridades. Sin embargo terminaron por ceder. La orden que se giró para darles acceso, autorizaba el uso de la fuerza pública y el rompimiento de cerraduras.
“Para el debido cumplimiento de lo ordenado, se autoriza el uso de la fuerza pública y el rompimiento de cerraduras, para lo cual se ordena se giren los oficios de estilo a la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México y las demás autoridades de estilo, para que auxilien al actuario ejecutor en el acto de la diligencia en caso de ser requerido. Para el debido cumplimiento de lo ordenado, se habilitan días y horas inhábiles”, se lee en la orden emitida por un juez en favor del hasta entonces suspendido Consejo de Administración a cargo del presidente José Antonio Marín.
Es la segunda ocasión en menos de un año que el grupo opositor toma las instalaciones de Cruz Azul en Gran Sur a través del uso de la fuerza pública. El pasado 28 de agosto de 2019, la toma de posesión duró algunas horas hasta que Guillermo Álvarez y los socios y empleados afines a él recuperaron el control.
Guillermo Álvarez, quien es investigado y enfrenta una orden de aprehensión por los delitos de delincuencia organizada y operación con recursos ilícitos, habría renunciado a su puesto como director general de la Cooperativa Cruz Azul.
La orden, emitida por Iván Aarón Zeferín Rodríguez, juez de distrito Especializado en el Sistema Penal Acusatorio en el Estado de México, con residencia en Almoloya de Juárez, fue revelada por el medio deportivo ESPN el día 29 de julio de 2020.
Hace dos meses, la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) congeló las cuentas de Guillermo Álvarez Cuevas, presidente de Cruz Azul y director de la Cooperativa; Víctor Garcés, ex vicepresidente de Cruz Azul, y Alfredo Álvarez Cuevas, director de Planeación Estratégica, por sospechas de lavado de dinero, compra irregular de jugadores y operación con recursos ilícitos.
La UIF detectó movimientos irregulares por más de 1,300 millones de pesos a cuentas de bancos internacionales y 300 millones de pesos que la Cooperativa entregó a empresas fantasmas.
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