Todavía retumban en el mundo de la Fórmula 1 las declaraciones que hizo el presidente de la histórica marca del automovilismo mundial. “Tenemos debilidades estructurales desde hace mucho tiempo, especialmente en la aerodinámica. Además, hemos perdido potencia en el motor, por lo que la realidad es que nuestro coche no es competitivo”, advirtió John Elkann, el responsable de Ferrari, que también indicó que recién esperan volver a ganar en 2022.
Así que, mientras Mercedes es una vez más el gran candidato a quedarse con el título de constructores y de pilotos de la mano del británico Lewis Hamilton, la escudería con sede en Maranello volvió a tener una jornada para el olvido en la nueva fecha de la categoría. En lo que fueron los primeros entrenamientos del Gran Premio de Gran Bretaña en el histórico circuito de Silverstone, Sebastian Vettel sufrió varios problemas que terminaron con una imagen que recorrió el mundo del deporte motor.
En lo que fue la primera tanda, la Ferrari que conduce el piloto alemán tuvo problemas con el motor. A bordo del monoplaza SF1000, el cuatro veces campeón se comunicó por radio con su box y fue claro en el mensaje: “hay algo suelo”, le dijo el cuatro veces campeón de F1 a los técnicos de la escudería italiana. Una vez que Vettel llegó a los boxes y guardó el auto, se bajó y comenzó a ayudar a los mecánicos para encontrar la falla.
Poco tiempo más tarde, fue la propia categoría a través de sus redes sociales la que comunicó cuál fue el inconveniente que tuvo el auto piloteado por el corredor nacido en Alemania. La marca del Cavallino Rampante tuvo un problema con el impulsor en la unidad de Vettel al volante relacionada con el intercooler, un elemento que tiene como objetivo enfriar el aire del compresor.
Ya en la segunda parte de los trabajos en pista de este viernes, la Ferrari del alemán padeció un conflicto en los pedales, por lo que tuvo que regresar a ser atendido por los ingenieros del equipo. Al final la doble tanda, Vettel terminó en el puesto número 18, a más de un segundo de distancia de su compañero, el monegasco Charles Leclerc, que cerró la actividad del día en el cuarto lugar.
Más allá de los problemas que tuvo Vettel con su Ferrari, el día 1 de acción de la F1 en Silverstone terminó con el Red Bull de Max Verstappen y el monoplaza de Racing Point manejado por Lance Stroll como los más destacados de las pruebas inicial. Por su parte, el piloto alemán Nico Hulkenberg, que tomó el lugar del mexicano Checo Pérez -dio positivo de coronavirus y se perderá el fin de semana de carrera-, completó un buen estreno a bordo del otro coche de los llamados “Mercedes Rosa” y se ubicó entre los 10 primeros en las dos clasificaciones.
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