El mundo avanza. Lo mismo sucede con la medicina, que con el paso del tiempo generó cambios sustanciales en la vida de las personas. Una situación similar atraviesa la medicina deportiva, que gracias a nuevos métodos que surgieron con el paso de los años mejoró el rendimiento de los atletas y les permite extender su vida útil ligada al alto rendimiento.
En este sentido, y gracias al aporte de una médica argentina, el deporte en América Latina está en proceso de sumar una técnica innovadora, la más avanzada en el resto del mundo en relación a la medicina regenerativa aplicada a la actividad física de competencia. La doctora Mariela Guasti, socio fundadora y presidente de la Sociedad Latinoamericana de Medicina Regenerativa (SLAMR), logró un acuerdo sin precedentes para la región.
Gracias al convenio de exclusividad que generó Guasti con el Dr. Pedro Guillén -máximo referente de la traumatología en España- en los países de América Latina se podrá desarrollar la técnica de reemplazo de cartílago articular más moderna y eficaz conocida hasta el momento y que se denomina ICC, las iniciales del proceso llamado Instant CEMTRO cell. El método consiste en la reparación de una lesión mediante el cultivo de células de cartílago del propio paciente -se llaman condrocitos-, su expansión en ambiente controlado y el posterior implante una vez lograda la dosis óptima para producir la regeneración.
En diálogo con Infobae, la médica remarcó el valor de conseguir sumar un nuevo avance en la medicina regenerativa relacionada al deporte. “El esfuerzo que hicimos en traer la técnica y el plan de desarrollo que seguimos impulsando en articulación con otras ramas de la ciencia nos coloca a la vanguardia en las terapias regenerativas y nos equipara con el mundo desarrollado, ya que no existe hasta el momento en Latinoamérica ningún otro tratamiento aprobado por la Administración de Alimentación y Medicamentos de EEUU que pueda brindar estos resultados”.
“Esto coloca a la Argentina como el primer país capaz de transferir estos conocimientos en colaboración directa con su creador”, agregó Guasti, especialista en medicina interna y en estadística para ciencias de la salud, que además posee un Máster en ecografía músculo esquelética.
Experta en química analítica, esta profesional de la salud se dedica a la investigación en áreas de desarrollo de alimentos y medicamentos desde hace más de dos décadas, lo que le permitió impulsar su propia búsqueda de nuevas soluciones en la medicina regenerativa.
Su inquietud en la materia la llevó a encontrarse con la técnica que permite mejorar la calidad de vida y facilitar el retorno de los deportistas a su disciplina después de sufrir lesiones, según la experiencia recabada por la clínica española del doctor Guillén, que trató a todo tipo de deportistas, desde futbolistas de los planteles del Real Madrid, del FC Barcelona, el Inter de Milán y hasta a jugadores que pasaron por la selección argentina. “El implante de condrocitos autólogos se hace desde el año 1996 con métodos más rudimentarias. La técnica ICC es la última generación y por eso la más eficaz”, indicó la especialista.
Según Guasti, dicho método aplicado en deportistas de alto rendimiento es muy valorado, dado que tiene repercusiones positivas en un plazo muy corto y le brinda al protagonista la seguridad para regresar a la actividad deportiva. Más allá de ser una ciencia aplicada a la alta competencia, todas las personas pueden tener acceso a esta solución mediante una evaluación previa.
La aplicación del tratamiento es altamente eficaz para la resolución de lesiones que producen pérdida local del cartílago en las articulaciones de carga -la rodilla, tobillo, y cadera- desde la adolescencia y hasta los 60 años de edad. El objetivo central es que el paciente pueda volver a disfrutar de una vida sin dolor y realizando todas sus actividades sin limitaciones, justo como lo hacía antes de lesionarse.
¿Cómo es el procedimiento para tomar los cultivos del organismo del atleta? “Se toma una pequeña muestra del tamaño de tres granos de arroz en una zona que no sufre carga y por lo tanto no le trae ningún problema a la persona y se realiza por un método poco invasivo como es una artroscopia. De esta forma, el paciente puede criopreservar cartílago sano para una futura intervención necesaria”, explicó Guasti, al mismo tiempo que estableció los pasos necesarios para reinsertar esas células que ayudarán al tratamiento de una lesión.
“Una vez alcanzada la cantidad de células suficiente (dosis terapéutica) se colocan sobre una membrana reabsorbible y se sutura revistiendo la lesión. En algunas semanas, los condrocitos habrán desarrollado su matriz extracelular de colágeno tipo II y agrecanos, resolviendo así el defecto que provocó la lesión. El traumatólogo de mi equipo, Roberto Heredia, ya está habilitado para realizar dicho procedimiento en Argentina”.
Al ser un método de medicina personalizada, cada persona tendrá el efecto correspondiente según su tiempo de recuperación. Más allá de este escenario, que es propio de cada paciente, Mariela asegura lo positivo del postoperatorio comparado con otras técnicas. “La recuperación respecto del dolor es prácticamente inmediata. Luego dependerá de la rehabilitación, claro, etapa en la que también acompañamos ese proceso con fisioterapeutas entrenados en la técnica y en la prevención de nuevas lesiones”, dijo Guasti.
“El retorno a las actividades en alto rendimiento pueden llevar entre 8 y 15 meses, pero el atleta gana recuperar la salud de su articulación sin necesidad de someterse a otros tratamientos paliativos que solo le tratan el dolor y, a su vez, recupera su rendimiento como lo era previo a lesionarse”, advirtió.
Después del éxito del tratamiento en Europa y Estados Unidos, la medicina regenerativa aplicada al deporte está en proceso de desembarcar en la Argentina y el resto de Latinoamérica. “En una primera etapa los cultivos celulares se derivarán a España y todo el resto se hará aquí. La segunda etapa, que es la que estamos poniendo a punto, es la de realizar los cultivos celulares en Argentina y proveer desde aquí a toda Latinoamérica: eso se llama transferencia tecnológica y es en lo que estamos trabajando en la actualidad”, expresó Mariela Guasti.
Con casos testigos que demuestran el valor de apostar por método innovador, como fue el caso de Sergio Solanas -especialista español en el salto triple que formó parte del equipo de atletismo de élite en España- y el de otros en gran parte del mundo, la medicina regenerativa aplicada al deporte se suma a la evolución de un campo cada vez más necesario para el cuidado de las mujeres y los hombres que dedican gran parte de su tiempo a la disciplina elegida.
En Argentina, esta particular técnica ya está en pleno proceso de desarrollo, gracias al impulso de una especialista que busca mejorar la calidad de vida de aquellos que viven las 24 horas del día pensando en mejorar su rendimiento y cuidar su cuerpo de pasadas o futuras lesiones.
“Nuestro objetivo para 2021 es organizar el primer Congreso latinoamericano de medicina regenerativa aplicada al deporte; desde ya que participarán las asociaciones y clubes de la región dado el interés que manifiestan en cuidar la salud de sus atletas, y para brindarles nuevas herramientas en el cuidado y la calidad de vida futura aún después de su retiro”, concluyó Guasti.
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