En medio de una crisis en la que lleva sumergido más de 13 años, la escudería Ferrari parece estar muy cerca de tocar fondo en este 2020. De esta manera, el director del equipo Mattia Binotto parece haber tomado la resolución de realizar un “cambio decisivo” con el objetivo de poder revertir el mal arranque de la marca italiana en las primeras tres fechas de la temporada.
A solo tres días de lo que fue el Gran Premio de Hungría en el que Sebastian Vettel salió sexto y Charles Leclerc llegó en la 11ª posición, desde la firma con sede en Maranello sorprendieron con una reestructuración interna con el objetivo de “hacerlo más efectivo y asegurar un énfasis más integral en el desarrollo del rendimiento. Esto se logra instituyendo una cadena de mando más centrada y simplificada que proporcionará a los jefes de cada departamento las facultades necesarias para alcanzar sus objetivos”, según informó en un comunicado.
El principal cambio consiste en la creación del Departamento de Performance, que estará a cargo de Enrico Cardile, un aerodinámico italiano que hace tiempo trabaja dentro de la escudería. Este nuevo espacio contará con la experiencia de Rory Byrne y de ingenieros de renombre como David Sánchez, quienes serán la punta de lanza en el desarrollo del nuevo SF1000.
Además, informaron que “las otras áreas principales no se han modificado”, con Enrico Gualtieri a cargo de la Unidad de Potencia; Laurent Mekies como Director Deportivo y a cargo de las actividades de pista; y Simone Resta seguirá al frente del Departamento de Ingeniería de chasis.
“Creemos que el personal de Ferrari es del más alto nivel y no tenemos nada que envidiar a nuestros principales competidores a este respecto, pero tuvimos que hacer un cambio decisivo, elevando el listón en términos de las responsabilidades de los jefes de departamento”, explicó Binotto, quien tras asumir el año pasado en su cargo ya está en el ojo de las críticas debido a la decadencia del equipo más ganador de la F1.
Esta medida llevada a cabo por la cúpula de La Rossa parece una intención desesperada por revertir el mal desempeño que están teniendo en la actual campaña. La casa italiana se encuentra en el quinto puesto del campeonato de constructores con 27 puntos, 13 por detrás de Racing Point y mucho más lejos de las 121 unidades que acumula Mercedes Benz. En cuanto a la tabla de pilotos, el mejor ubicado es Charles Leclerc con el séptimo escalón con 18 puntos, cuatro detrás de Sergio Pérez y a 45 de Lewis Hamilton, líder absoluto.
Tras el inicio de la actividad, que se debió retrasar este año debido a la pandemia del coronavirus, en la segunda fecha se dio una acción que ya había arrojado un mal augurio para que equipo, luego de que en el GP de Austria, sus dos pilotos hayan quedado afuera del circuito tras un toque entre ellos.
Este año parece ser el peor de una crisis que data desde la disolución del exitoso trípode conformado por Jean Todt como Director Deportivo, Ross Brawn como responsable técnico y Michael Schumacher como piloto principal en 2006. Todos bajo la presidencia de Luca Cordero di Montezemolo. El último título de la escudería, conseguido a manos de Kimi Räikkönen en 2007, fue solo una bocanada de aire.
Fue el propio di Montezemolo, quien dejó Ferrari en 2014, quien se mostró preocupado por el presente del equipo más importante de la máxima categoría del automovilismo mundial. ”Me parece excesivo hablar de reestructuración del equipo, pero hay que organizarlo lo antes posible. Y si el coche no mejora este año, será aún peor la temporada que viene. Hay que ser valiente para dar por perdido 2020 porque también se juegan 2021 y 2022. Estoy muy preocupado”, analizó en una nota que brindó a La Politica nel pallone de Gr Parlamento.
Cabe recordar que el próximo año, La Rossa ya no contará con la presencia del alemán Vettel, cuatro veces campeón pero con el logo de Red Bull, ya que como él mismo anunció “no le ofrecieron renovar su vínculo”. Esto significará otra gran pérdida para la firma italiana, que depositará su confianza en el joven español Carlos Sainz, con el objetivo de devolver a la escudería a la gloria que supo tener.
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