Este fin de semana los fans de las artes marciales mixtas sintonizaron el evento de UFC 248 con la esperanza de deleitarse ante el show de combate que proponían Israel Adesanya y Yoel Romero, pero el espectáculo se lo robaron Beneil Dariush ante Drakkar Klose.
El iraní y el estadounidense protagonizaron una gran pelea que tuvo todo lo que los aficionados quieren: tomas, puñetazos, sangre y un nocaut fulminante. El triunfo se lo quedó Dariush, gracias a un zurdazo directo al mentón de su contrincante que tras el impacto se le salió el protector bucal y cayó hacia atrás con la mirada perdida, gesto que justifica la decisión del árbitro de terminar la pelea.
Ese final anticipado del segundo round hizo saltar de su silla a los comentaristas del evento, quienes fueron grabados tomándose la cabeza y sorprendidos por lo que acababan de ver.
Dariush, de 30 años, suma ahora un total de 18 triunfos, cuatro por nocaut y ocho por sumisión, y un empate en 21 presentaciones. Su anterior presentación había sido victoria por sumisión, su especialidad, frente a Frank Camacho en Singapur en octubre de 2019.
El luchador nacido en Irán explicó que su esquina el recomendó tras el final del primer asalto que se anime a dar algunos golpes y que deje de lado las tomas. “Si me pegas yo digo ‘bueno juguemos este juego, me gusta’. A veces juega a mi favor, a veces en mi contra, hoy estuvo de mi lado y creo que valió la pena”, declaró tras el final.
Lamentablemente para los fanáticos, esta pelea fue de las mejores de la noche, ya que la principal terminó entre abucheos. Israel Adesanya venció por decisión de los jueces al cubano Yoel Romero y retuvo el título, aunque el público se fue disconforme porque hubo pocos momentos de violencia en los cinco asaltos.
El gran combate de la noche sin dudas fue el que protagonizaron Weili Zhang y Joanna Jedrzejczyk, quienes dejaron todo en el octógono y se llevaron la ovación de los aficionados. La china de 30 años ganó por decisión unánime de los jueces (30-27, 30-27, 30-27).
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