La jornada número 24 de la cuarta división del fútbol italiano dejó un llamativo episodio, el cual sucedió durante el partido que disputaron el líder del Grupo E, el Grosseto, contra su inmediato perseguidor, el Monterosi.
El encuentro transcurría con normalidad. El conjunto local abrió el marcador a los 49 minutos con un tanto del joven mediocampista de 23 años Filippo Boccardi y el rival estaba cerca del empate.
Fueron momentos tensos los que se vivieron en el Estadio Olímpico Carlo Zecchini, de la ciudad de la Toscana, emociones que dejaron en evidencia al entrenador Lamberto Magrini, quien terminó viendo la victoria de su equipo en los vestuarios tras golpear a uno de sus jugadores.
La insólita situación se produjo a los 74 minutos. El técnico consideró que debía sacar al mediocampista Riccardo Cretella para sumar un nuevo defensor y así mantener la ventaja. Sin embargo, el futbolista de 25 años no tomó muy bien la sustitución y le hizo un gesto con la mano a su entrenador mientras se dirigía a los banquillos.
Fue en ese instante cuando las cámaras tomaron el momento en el que Magrini lo golpeó en la cabeza ante la mirada atónita del resto de la plantilla que no podía creer lo que estaba ocurriendo. Aquella cachetada fue vista por el árbitro asistente, quien inmediatamente le avisó al árbitro del partido.
Alertado por la situación, Carlo Rinaldi se metió la mano en el bolsillo mientras se dirigía hacia el banco de suplentes del Grosseto y le enseñó la tarjeta roja a Magrini. A pesar de intentar explicarle lo que había ocurrido, el colegiado fue determinante y el técnico debió abandonar el campo.
En zona mixta, el entrenador habló acerca de lo que había sucedido en los banquillos: “Cretella quería quedarse en el campo, pero lo vi muy cansado y lo cambié (...) Sé que es un jugador fundamental para el equipo”. Además, aseguró que el cambio lo hizo por una cuestión técnica, ya que consideró que necesitaba gente de altura para defender y Ravanelli, que ingresó por Cretella, medía 1,98.
Con la victoria, el Grosseto se aseguró el primer puesto de la clasificación con 48 puntos en 24 partidos, por sobre su rival, el Monterosi, que perdió el primer lugar al quedar con 47 unidades.