Fue en el 2018 que el exbasquebolista Kobe Bryant eligió Los Cabos, Baja California, para celebrar su cumpleaños número 40. La estrella del baloncesto estadounidense murió este domingo 26 de enero en un accidente de helicóptero, en el que viajaban otras ocho personas, y una de ellas fue su hija Giana.
Aquella fecha especial lo celebró en compañía de su esposa Vanessa y, con tres de sus cuatro hijas: Natalia, Giana y Bianka, ya que Capri nació en junio del 2019.
El pasado 27 de agosto del 2018, Kobe Bryant compartió en su cuenta de Instagram las imágenes de su viaje a los Cabos, en compañía de su familia.
Black Mamba, como se le conocía al basquetbolista, también mostró una fotografía que la acompañó del siguiente mensaje: “Sorpresa. Viaje familiar a los Cabos por mi cumpleaños”.
Dichas vacaciones las pasó en el lujoso resort Ty Warner Mansion, en el portal de dicho resort se describe como uno de los escondites más elogiados de América Latina.
Su conexión con el público latino
El cinco veces campeón de los Lakers contó en una entrevista para NBA que perfeccionó su español viendo programas latinos con su esposa Vanessa Cornejo Ubrieta (quien la conoció en 1999) y su suegra.
Con Vanessa, quien sus padres son mexicanos, perfeccionó parte de lo aprendido, porque una de las razones por las que buscó aprender el idioma fue para tener una mejor comunicación con los aficionados de los Lakers, ya que en Los Ángeles se encuentra la comunidad más grande se latinos en Estados Unidos.
En diciembre del 2017, el ex jugador confesó que además de contar con la ayuda de su esposa, también miraba la telenovela de “La Madrastra” y el programa de “Sábado Gigante”. Dicha entrevista, todas sus respuestas fueron en español.
Él es el cuarto jugador con más puntos en la historia de la NBA (33,643 unidades) y confesó en abril del 2016 que fueron los fans latinos de los que más apoyo recibió, “porque cuando llegué aquí, fueron los fans que más me abrazaron, con mucha pasión”.
Contó que en ese momento les pidió paciencia a los fanáticos para que se pudiera comunicar de una mejor manera con ellos.
“Dame dos o tres años y voy hablar un poco de español. Ahora mi español no es muy bueno, pero puedo hablar un poco. Ellos significan todo para mí. Tener una esposa latina, también es muy significativo”, contó uno de los mejores basquetbolistas de la NBA.
Tras disputar 20 temporadas en la NBA, ganar cinco títulos con los Lakers, ser nombrado en dos ocasiones como el mejor jugador en las Finales, ser seleccionado en 18 ocasiones para el Juego de Estrellas y colaborar para que Estados Unidos ganara dos medallas de oro en Juegos Olímpicos (2008 y 2012)
En relación con su legado, describió que los deportistas tienen que jugar con mucha pasión, “amar este juego, ese es el regalo que les pudo dejar”.
Kobe era ese jugador que acostumbraba dar instrucciones a sus compañeros, y les mencionaba cuál debía ser el siguiente movimiento, porque decía que cuando un jugador entraba a la cuela debía saber qué hacer.
Detestaba que una persona perdiera el balón y además diera excusas. Su amor por el deporte era casi obsesivo y eso hizo que buscara continuamente la perfección, situación por lo que llegaron a juzgarlo de arrogante, egocéntricos o poco amigable.
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