Christian “Chaco” Giménez fue un referente en cada club por el que pasó. Asimismo, logró varios campeonatos en su carrera, jugó en el mundial de clubes y formó parte de la selección nacional de México, a pesar de ser un argentino de nacimiento. Por todo eso y más, fue homenajeado este sábado en la cancha del estadio Hidalgo.
El argentino naturalizado mexicano dijo adiós al fútbol en el Clausura 2019, retirándose con el Pachuca, uno de los clubes con los que ganó casi todo. Sin embargo, el Chacho organizó este partido para despedirse como lo que fue: uno de los mejores futbolistas que ha jugado en México.
Apoyado por las dos instituciones que más quiere, el ex futbolista formó dos equipos: Históricos de Pachuca vs. Históricos de Cruz Azul. Entre los jugadores estuvieron Marco Fabián, Emanuel “Tito” Villa, Gerardo Torrado, Andrés Chitiva, Damián Álvarez y Armando Navarrete, con los que alguna vez compartió vestidores en su carrera.
También estuvieron presentes personas con las que convivió en su paso por las cachas. Algunos fueron Carlos Bianchi, con quien estuvo en Boca Juniors, Enrique “Ojitos” Meza, quien lo dirigió en Cruz Azul, Guillermo Álvarez, presidente de “La Máquina” y, por supuesto, miles de aficionados que recuerdan con cariño las actuaciones del volante.
Aunque no terminó el partido, el público pudo ver bastantes goles. Históricos de Pachuca venció a Históricos de Cruz Azul por un marcador de 4 goles a 2. Los tantos fueron de Emanuel Villa, Bruno Marioni, Juan José Calero, Damian Álvarez y Fran, un amigo del ex jugador.
El partido vivió momentos emotivos. Uno de ellos fue en al comienzo del segundo tiempo. El ex de Pachuca le realizó un homenaje a Miguel Calero, portero que falleció en 2012. Con una playera parecida a las que usaba el arquero colombiano, Giménez disputó los primero minutos de la segunda parte, en la que realizó una gran atajada y recibió un gol de Damián Álvarez. Luego salió por Armando Navarrete.
Otro de los momentos más sentimentales fue cuando Francisco “Pipi” Giménez, padre el ex futbolista, y Santiago Giménez, hijo del ex de Cruz Azul, compartieron la cancha. Aunque ninguno anotó un gol, los dos se divirtieron junto al ídolo de México realizando pases e intentando llegar al área contraria.
El momento más emotivo fue al minuto 24, cuando el partido se detuvo y las dos hijas y Santiago entraron al campo para abrazar a su padre. Entre lágrimas, el jugador fue dirigido hacia las pantallas del estadio. Ahí presentaron un emotivo video.
La filmación era de las palabras de su madre, su padre, su hijos y su esposa, en las que le recordaron lo especial que es el ex jugador para ellos. También recordaron lo difícil que fue para ellos no verlo durante la concentración de los partidos, pero aseguraron que ese fue su destino.
Después, Christian tomó un micrófono y ofreció una palabras para todos los presentes. “Yo no soy ídolo, quiero que ya no digan eso, porque yo soy una persona que siempre dio todo en cada entrenamiento y en cada partido. Lo único que tenía que hacer era representar de la mejor manera la camiseta que estuviera vistiendo”, aseveró Giménez.
Soy un privilegiado. Yo no sé si merezco tanto
“Tengo que decir que, cuando me retiro, es porque ya no podía más. La pasaba bien en el día a día, entrenando toda la semana, pero cuando llegaba el fin de semana y me tenía que transportar, ya sabía que iba a jugar solamente cinco o diez minutos, entonces llegó el momento de decidir “, aseveró respecto a su forma física.
También agradeció a su esposa, a sus hijo, a sus padres y a su hermana, mientra todos lloraban por sus emotivas palabras. Además, también agradeció a Cruz Azul, a Pachuca, a Veracruz y hasta el América, aunque fue abucheado por el público del estadio Hidalgo.
Durante 20 años, Chaco consiguió una Copa Libertadores con Boca Juniors, levantó en cuatro ocasiones el título de la Concachampions, una Copa Sudamericana, un campeonato en la Liga MX y una Copa MX. Además, se naturalizó mexicano y fue convocado en dos ocasiones al tricolor.
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