Este fin de semana se celebró en el TD Garden de Boston, Massachusetts, el combate de UFC entre Dominick Reyes y el ex campeón de peso mediano, Chris Weidman. Como antesala de la gran pelea se dio también el cruce entre Greg Hardy y Ben Sosoli.
Si bien el show que los norteamericanos brindaron sobre el octógono no fue el mejor, sí se dio un curioso hecho del cual no había antecedentes y que generó revuelo en la compañía que organiza las peleas más importantes de artes marciales mixtas (MMA).
Al finalizar los tres asaltos, los jueces dieron por ganador a Hardy por decisión unánime. Sin embargo, minutos después se cambió el resultado y se anunció que no habría ganador: “No contest”. Según informaron las autoridades, entre rounds, el luchador utilizaba un inhalador, algo que está prohibido en el reglamento.
“Mi equipo y yo preguntamos a la comisión si podía utilizar el inhalador, y nos dijeron que sí, así que lo utilicé. Soy nuevo en este deporte. Hice lo que hago siempre: pedí permiso, me lo concedieron e hice lo que me dijeron. En esta pelea quería demostrar que he mejorado como peleador, sin cometer tantos errores de novato. Ahora volveremos al gimnasio y dejaré que mi equipo tome la próxima decisión“, dijo tras la pelea el ex jugador de fútbol americano.
Dana White, presidente de UFC, explicó cómo vivió la situación: “Fue una locura. Todos comenzaron a gritarme: ‘¡Usaba un inhalador! ¡Usó un inhalador!’. Creo que ni siquiera podía entenderlos. Fue como: ‘¿Qué quieres decir con que usó un inhalador?’. Entonces, cuando terminó la pelea, me acerqué a Din Thomas y le dije: ‘¡¿Qué diablos estás haciendo?! ¿Cómo estás usando un inhalador?’. Y él dijo: ‘La comisión dijo que podíamos?’. ¿Qué comisión? ¿Cuando? ¿Cómo? Entonces nuestro equipo comenzó a investigar a ver qué estaba pasando".
UFC sólo permite el consumo de agua sellada, antes revisada por las autoridades del evento. Sin embargo, el equipo de Hardy desconocía esto y por eso la pelea quedó sin resultado.
MÁS SOBRE ESTE TEMA: