Tras la gloriosa etapa de la mítica Generación Dorada, un nuevo grupo de jugadores volvió a dar el golpe en el plano internacional con la Selección de básquet. Con el interminable Luis Scola como bastión y guía, los dirigidos por Sergio Hernández consiguieron un subcampeonato del mundo en China y ahora apuntan a agigantar su legado en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.
Dentro de esta nueva camada de jugadores que asoma, muchas esperanzas están depositadas en lo que pueda realizar el joven Leandro Bolmaro, quien con solamente 19 años se desempeña en el Barça Lassa (el equipo de básquet del Fútbol Club Barcelona), conjunto de la Liga ACB de España.
El categoría 2000, nacido en Las Varillas, Córdoba, como Fabricio Oberto, campeón olímpico en Atenas 2004 y de la NBA con los San Antonio Spurs; es un escolta que cuenta con una capacidad anotadora envidiable y en los últimos años viene teniendo una carrera que asciende de manera meteórica.
El basquetbolista, de 2.03 metros de estatura y 81 kilos, inició su camino con la pelota naranja en el Club Almafuerte, hasta que en 2017 desembarcó en un lugar ideal para progresar: Bahía Basket, con Pepe Sánchez (base de la Generación Dorada) como líder del proyecto y con Sebastián Ginóbili (uno de los hermanos de Manu), como entrenador.
Sus jugadas y el talento mostrado en la Liga de Desarrollo (una competición que utilizan los equipos argentinos para formar a sus jóvenes) y en la Liga Nacional llamaron la atención de algunos scouts de distintas instituciones de Estados Unidos y de clubes de Europa, lo que le valió participar del Basketball Without Borders en 2017 y 2018 (un torneo organizado por la liga estadounidense), del NCAA Next Generation Sunday 2018 (certamen donde las universidades de Estados Unidos pueden ver prospectos para sumar a sus filas) Y el Nike Hoops Summit (disputó 10 minutos y anotó 6 puntos en la selección del Resto del Mundo en la victoria ante Estados Unidos).
EN ESPAÑA LO CATALOGAN COMO EL PRÓXIMO MANU GINÓBILI:
“El Barça Lassa ficha al próximo Manu Ginóbili”. Ése fue el título que escogió Mundo Deportivo para anunciar la contratación del cordobés.
En su primer temporada en España, donde defendió la camiseta del equipo B del club catalán, disputó 33 partidos, en los que promedió 10.4 puntos, 3.1 rebotes, 2.7 asistencias, 1.24 robos y 0.27 bloqueos.
Aunque en un principio se pensaba que durante esta temporada le iba a ser difícil ganarse un lugar en el equipo A debido a la gran erogación de dinero que realizó la institución para ir en búsqueda de la Euroliga (el fichaje estelar fue el de Nikola Mirotic), Bolmaro actualmente se entrena junto al plantel superior y hasta debutó en el plano internacional. Fue en un encuentro ante Zenit, en el que aportó 5 puntos, 1 asistencia y 2 robos.
“Estamos ilusionados en Barcelona con su aptitud y actitud. La verdad es que desprende ganas de jugar al baloncesto. Ahora está en el primer equipo, ya que por diferentes circunstancias ellos lo necesitan. La temporada es larga y luego veremos si vuelve al Barça B. Ahora mismo se ha ganado un lugar en el primer equipo”, manifestó Diego Ocampo, entrenador del segundo equipo del elenco azulgrana, en diálogo con Infobae.
A la hora de describir su juego, el coach sostiene que “Leandro es un jugador que tiene mucha actitud, tanto en ataque como en defensa, es un combo. Es muy habilidoso con el balón, es muy anotador. Tiene un gran instinto para meter puntos”. Y agregó: “En general, los argentinos pasan muy bien el balón. Si bien ya lo venía haciendo bien, en el último año mejoró muchísimo”. Un claro ejemplo es la exquisita asistencia que le dio a Nikola Mirotic en su estreno en el Palau Blaugrana ante Valencia.
Dotado de un físico privilegiado, Bolmaro aprovecha su potencia y visión de juego para desempeñarse como base, aunque también puede hacerlo como escolta o alero.
Pese a su juventud, Ocampo destaca que pocas cosas son las que Bolmaro debe pulir: “Debe mejorar la concentración y su continuidad en el tiro, pero que es algo propio de la edad. Lo está trabajando y lo está haciendo muy bien”. La intención del Barcelona es aportarle un mayor abanico de variables a la hora de tomar decisiones.
“Bolmaro tiene un gran futuro. Es trabajador, talentoso y tiene el respeto de los veteranos. Creen en él y es importante para crecer. Leo Messi es la marca del Barcelona, y ahora también tenemos un Leo en el baloncesto”, bromeó Svetislav Pesic, entrenador del equipo A, sobre el buen presente del cordobés.
Su pronta irrupción en el primer equipo hizo que ganara notoriedad en los medios internacionales, pero su entrenador pide cautela y asegura que dentro de su progresión debe ir poco a poco, citando los casos de Tomáš Satoranský (Chicago Bulls), Kristaps Porziņģis (Dallas Mavericks), Willy Hernangómez (Charlotte Hornets) o Juancho Hernangómez (Denver Nuggets).
“Es solo un chico de 19 años que tiene que seguir estudiando, como hizo el año pasado y como está haciendo ahora. Debe hacer una vida de una persona de 19 años, pasándola bien, estudiando, entrenando y jugando. Poco a poco veremos qué pasa. Cuanto más centrado esté en el día a día, sin pensar mucho en lo que puede pasar en el futuro, será mejor para él. Ésa es la clave del éxito”, aseguró.
BOLMARO LIDERA LOS PRINCIPALES RÁNKINGS DE JÓVENES TALENTOS:
Según el sitio EuroHopes, que se especializa en la evaluación de jugadores jóvenes, colocó al argentino como el mejor proyecto de la clase 2000, por encima de jugadores como Arturs Zagars (letón -Club Básquet Prat), Nikita Mikhailovskii (ruso - Avtodor Saratov) o Carlos Alocén (español - Casademont Zaragoza).
Pero su talento trasciende el Viejo Continente y varias franquicias de la NBA lo tienen en la mira. Luego de anotarse en el draft del año pasado (luego se bajó a último momento), el sitio nbadraft.net lo pone como la elección 14 de la edición 2021 de esta “lotería”, colocándolo de esta manera como el argentino que se encuentra más cerca de desembarcar en la liga estadounidense tras el retiro de Manu Ginóbili en 2018.
“Evidentemente tiene talento para llegar a la NBA”, avisó sin tapujos Diego Ocampo en diálogo con Infobae. Sin embargo, luego aclaró: “Para jugar de verdad hay que hacer una serie de pasos, como hicieron Pablo Prigioni, Luis Scola, Andrés Nocioni o Nicolás Laprovittola; de a poco. También le pasó a Manu Ginóbili”.
El bahiense, que pasó por la segunda división de Argentina e Italia, desembarcó en Estados Unidos tras conquistar Europa y convertirse en uno de los mejores basquetbolistas del continente.
“Creo que ese es el camino para hacer las cosas bien. La paciencia no es hoy en día un valor que esté de moda, pero creo que es importante para que el chico se siga desarrollando. El talento lo tiene, pero es bueno respetar las etapas y tener paciencia”, agregó el español.
El último argentino elegido en el draft de la NBA fue Juan Pablo Vaulet, que en 2015 fue seleccionado por los Charlotte Hornets (el equipo del que es dueño Michael Jordan) en la segunda ronda del sorteo y luego fue canjeado a los Brooklyn Nets. El cordobés de 23 años actualmente se desempeña en el ICL Manresa de España.
Bolmaro, que este año disputó el Mundial Sub 19 (promedio 10.8 puntos y 2 asistencias), en caso de seguir con esta evolución, podría pujar por un lugar en la lista para disputar los Juegos Olímpicos de Tokyo. Aunque el entrenador Diego Ocampo prefiere la cautela: “Debe trabajar mucho y hacerlo bien para que lo vuelvan a llamar. No por mucho correr se llega alto… Lo importante es que eleve el listón, no que lo baje. Todos esperan que llegue y no hay que ponerlo ansioso. Lo importante es que sea un chico normal, que juegue lo mejor posible. Lo que vendrá, ya sea la NBA y/o la Selección, nadie puede saberlo, pero lo que es el día a día sí depende de él y de nosotros”.
Su explosión en este inicio de temporada no sorprende si se tiene en cuenta de que estuvo muy cerca de formar parte del plantel argentino que salió subcampeón del mundo en China (estuvo en la preselección de Sergio Hernández). Con su talento ya despertó el interés del mundo entero y solo el tiempo dirá hasta dónde llegará este joven al que ya le cuelgan el cartel de “próximo Manu Ginóbili” y el “Messi del básquet”.
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