El próximo lunes 18 de noviembre, Kansas City Chiefs y Los Angeles Chargers celebrarán el cuarto partido de temporada regular de NFL en la Ciudad de México. Será el primero de tres juegos correspondientes al nuevo contrato, mismo que se espera extender tan pronto se logre llegar a un acuerdo entre los implicados.
El problema es que este paquete de partidos oficiales se firmó durante la administración anterior, primero en 2016 y el segundo en 2018 -tras la cancelación del Chiefs-Rams por el mal estado del campo del Estadio Azteca-, los dos por un total de 1.600 millones de pesos (más USD 80 millones), por la contratación de un total de seis encuentros de temporada regular.
Dinero que muy difícilmente pagará la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador, cuyas políticas de austeridad llevaron a los organizadores del Gran Premio de México a crear un fideicomiso con capital privado para poder cubrir la parte que el gobierno declinó invertir.
"Estamos en pláticas, eso lo sabremos próximamente", respondió el director de NFL México, Arturo Olivé, cuestionado sobre si podrían replicar el modelo de la F1 para mantener los partidos en territorio azteca, durante la presentación del libro "Reglas de Juego Oficiales de la National Football League".
"Nosotros tenemos un contrato firmado por tres años, éste es el primero de esos tres años y estamos a la espera de recibir la respuesta de las instancias correspondientes para darle continuidad a este evento", explicó.
Fue a través del Consejo de Promoción Turística de México (CPTM) que se pudo financiar tanto la contratación de partidos oficiales de la NFL, como otros eventos deportivos de índole internacional.
No obstante, ante la "sospecha" de malos manejos dentro del organismo encargado de promocionar al país en el extranjero, con un fondo de cerca de 6.000 millones de pesos anuales, se optó por desaparecerlo, por lo que se volvió prácticamente imposible que dinero público pueda ser utilizado para mantener a la NFL en el país.
"Eso estamos viéndolo directamente con la Secretaría de Turismo y el mismo consejo, si bien está en liquidación, está todavía operando. En fechas próximas ellos mismos nos indicarán cuál será el camino a seguir", comentó Olivé.
"Sin embargo, estamos enfocados en el juego de 2019 para presentar el mejor evento posible para cumplir con los compromisos con el gobierno federal y local", reforzó.
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Pero cumplir esos compromisos no parece tarea sencilla. No después de lo ocurrido el año pasado cuando se canceló el partido entre Los Angeles Rams y Kansas City Chiefs debido al paupérrimo estado del césped del estadio Azteca, situación que enfureció a la liga y que tiene bajo la lupa al inmueble.
"Las revisiones (al Azteca) son semanales de parte mía y mensuales por parte de mis colegas en Estados Unidos. Vamos avanzando muy bien, resumo como lo hice hace unas semanas: la cancha está espectacular, está respondiendo al uso durante los juegos de Liga MX y estamos seguros que tendremos un gran evento el 18 de noviembre", reconoció el directivo.
Por lo pronto, contrario al partido entre Houston Texans y Oakland Raiders del 19 de noviembre de 2017, cuando la NFL regresó a México tras 12 años de ausencia y se agotaron los boletos de inmediato, ahora la demanda de entradas no ha sido tan alta.
"La venta va muy bien, tenemos poca cantidad de boletos disponibles pero todavía tenemos, hay pocos pero anticipamos que se van a agotar próximamente. La respuesta que tuvimos del público en cuanto a venta de boletos es muy favorable y repito, nos quedan algunos boletos, pero es un pequeño porcentaje del total del aforo del estadio", afirmó Olivé.
Los últimos estudios de la NFL arrojaron que los Chargers están entre los cinco equipos con más fanáticos en México debido a la cercanía con Tijuana, Baja California, cuando su sede estaba en San Diego, California. Empero, Kansas City es uno de los 10 equipos con menos afición azteca. Quizás la razón por la que el boletaje no ha sido vendido por completo.
"No lo tenemos exactamente (el último ranking de equipos con más fans en México), porque se está procesando la información, pero ambos gozan de una gran popularidad", aseguró.
"Los Chiefs se están haciendo de una popularidad importante, los Chargers históricamente tienen una gran afición en el Noroeste de la república por su entonces cercanía con San Diego, ahora también de alguna manera los lazos se mantienen con la ciudad de Los Ángeles, pero ambos equipos independientemente de la popularidad que tienen en México están teniendo un gran desempeño de unos años para acá", puntualizó.