La bebé de solo dos años que recibió un golpe con una bola de foul en la cabeza durante un partido de béisbol en el Minute Maid Park, campo de los Astros de Houston, sufrió fractura de cráneo y tuvo una convulsión.
Así lo dio a conocer un portavoz de la familia en un comunicado dado a conocer por los medios locales sobre los hechos que tuvieron lugar el pasado 29 de mayo.
Según la nota, la niña también tuvo sangrado subdural, contusiones cerebrales, edema cerebral y presentó un electroencefalograma anormal.
Los videos del momento en el que la bebé recibió el pelotazo
El portavoz indicó que la menor está tomando medicamentos para prevenir nuevas convulsiones.
La familia ha contratado al abogado Richard Mithoff para ser asesorada sobre el incidente, de acuerdo, también, con el comunicado.
Ese indica que no se ha presentado ninguna demanda, pero Mithoff detalló las lesiones en una carta a la organización de los Astros, informándoles de que él y el abogado de la familia, Steve Polotko, habían sido contratados.
"El representante de gestión de riesgos de los Astros se acercó a la familia y, ahora que la familia está representada por un abogado, quería que la otra parte supiera que estoy involucrado, para que puedan ponerse en contacto conmigo", dijo Mithoff al periódico Houston Chronicle.
En el mismo comunicado se indica que la bebé estuvo hospitalizada durante varios días y que su evolución y estado de salud se volverán a evaluar en julio.
La familia ha solicitado privacidad más allá de esa información, dijo Mithoff. Esta fue la primera vez que se reveló la gravedad de las lesiones.
La niña resultó lesionada cuando fue golpeada por una bola de foul del bate del jardinero de los Cachorros, el cubano Albert Almora Jr. durante un partido entre Chicago y los Astros
"Por ahora, solo rezo y estoy sin palabras… Soy padre de dos niños… Pero con la voluntad de Dios podré tener una relación con esta niñita por el resto de mi vida", aseguró el beisbolista en aquel entonces.
Como todos los estadios de las Grandes Ligas, el Minute Maid Park cuenta con una red para proteger a los fanáticos de los pelotazos de foul. Pero por el lado de la tercera base, esa malla solo llega hasta el punto donde termina el dugout del equipo visitante. Al parecer, la niña estaba sentada en la tercera o cuarta fila, a unos tres metros del lugar donde termina la red.
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