El delantero francés André-Pierre Gignac, que juega en el Tigres de la Liga mexicana de fútbol, aseguró que "ya casi" es ciudadano mexicano. "Acabo de aprobar mi examen de naturalización", le declaró a la revista L'Equipe.
"Me hicieron preguntas de cultura general e historia del país. Teníamos ese deseo, mi esposa y yo, de convertirnos en mexicanos, como nuestros dos últimos hijos, que nacieron en Monterrey", agregó Gignac.
El delantero fichó con Tigres en 2015, después de dos buenas temporadas con el Olympique de Marsella, donde fue dirigido por el argentino Marcelo Bielsa. En su paso por México acumula 100 goles y siete títulos, incluidas tres Ligas.
"(Mis hijos) ya tienen pasaporte mexicano. Todos nos integramos perfectamente. Hemos estado aquí durante casi cuatro años. Nos quedaremos mucho tiempo. Tiene sentido tener doble nacionalidad", detalló el futbolista.
El futbolista y Tigres extendieron en 2018 sus lazos durante tres años más –dos confirmados y uno opcional–. Cuando finalice su contrato, Gignac tendrá 36 años, por lo que es prácticamente un hecho que se retirará con el equipo de Nuevo León, en el norte de México.
Gignac admitió que "todavía tiene problemas" para darse cuenta de que vive a unos 9.000 kilómetros de Francia, y califica a México como su "El Dorado" particular. De acuerdo con la revista, Gignac intercambia frases "en un idioma mezclado entre francés y español" con sus hijos y esposa.
Edén, que en agosto cumplirá cuatro años, y Mavy, que nació en febrero, son los dos más pequeños del clan Gignac. André-Pierre tiene cinco hijos en total.
El delantero, que jugó para la selección francesa entre 2009 y 2016, donde hizo siete goles, ya presume a su hijo mexicano en sus redes sociales. "Uf, qué estilo. Te amo, mi futuro delantero del 'Tri'", escribió Gignac en referencia a la selección mexicana, acompañando el mensaje con una foto y un video de Edén jugando al fútbol y marcando goles.
El delantero ha pasado algunos días sin actividad en las canchas, debido a una lesión con la que jugó algunos partidos y que se recrudeció en las primeras semanas de marzo.
Pero el delantero podría estar listo para volver a las canchas el próximo martes, cuando Tigres enfrente a los Rayados de Monterrey, su rival de ciudad, en la primera final de la Liga de Campeones de Concacaf, mejor conocida como "Concachampions", que los felinos jugarán como locales.
Una semana después, Tigres visitará a la "Pandilla" en el cierre de la serie. El conjunto dirigido por Ricardo "Tuca" Ferretti ya sabe lo que es ganarle una final a su clásico rival: en 2017 los felinos consiguieron una Liga a costa de los Rayados.
Sin embargo, ni Gignac ni Tigres han conseguido un título internacional salvo la primera edición de la "Campeones Cup", un partido que se disputa entre el campeón de la MLS y el "Campeón de Campeones" Liga mexicana.
Tigres perdió tres finales internacionales consecutivas en los últimos años: en 2015, ante River Plate de Argentina, cayeron en la final de la Copa Libertadores, y posteriormente fueron subcampeones de la Concachampions en 2016 y 2017, cuando fueron superados por América y Pachuca, ambos de la Liga mexicana.