El fútbol femenino cada vez concentra mayor atención entre los fanáticos en Europa. Luego de los récords de asistencia establecidos semanas atrás en España y en Italia, esta vez fue el turno de Francia. El último sábado, el partido entre Olympique de Lyon y Paris Saint Germain (PSG) marcó un hito en la disciplina.
En total, 25.907 personas concurrieron al estadio Groupama (Parc Olympique Lyonnais) y disfrutaron de la aplastante victoria de las locales por 5-0 ante el elenco parisino. La argentina Soledad Jaimes concentró, pero no ingresó en el conjunto de Lyon.
El récord vigente se había establecido en junio de 2016 en un amistoso internacional ente la selección de Francia y la de Grecia al que habían concurrido 24.835 espectadores.
El Olympique de Lyon, en su rama femenina, es el equipo más poderoso de su país (lleva ganadas las últimas 12 ediciones de la Liga en forma consecutiva y se encamina hacia un nuevo título) y de Europa, ya que es el vigente tricampeón de la Champions League.
Los fanáticos suelen acompañar en gran número al equipo. La mayor asistencia registrada en la previa había sido otro partido ante PSG, aunque por Champions League, en abril de 2016 (220.50 personas), mientras que por la Liga el hito había sido un encuentro ante Guingamp en octubre de 2011 con 12.263 simpatizantes en las gradas.
Cabe destacar que Francia será el país anfitrión del próximo Mundial femenino, que se disputará del 7 de junio al 7 de julio próximos. El certamen tendrá nueve sedes y estadio Parc Olympique Lyonnais será una de ellas.
El trabajo en materia de difusión por parte de los clubes y al apuesta por el desarrollo de la disciplina hacen que el fútbol femenino gane cada vez más adeptos en el Viejo Continente. El pasado 17 de marzo, más de 60 mil personas presenciaron el partido entre los equipos de Atlético Madrid y Barcelona en el estadio Wanda Metropolitano por la Liga de España. Una semana más tarde, en Italia, 39 mil espectadores disfrutaron del duelo entre la Juventus y Fiorentina. Este fin de semana, el furor de las y los franceses demostró que la actividad está en un proceso en franco ascenso.
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