¿Qué pasa cuando profesionales del automovilismo, campeones en su momento, y ahora pilotos de la Fórmula E tienen que enfrentarse a la dura tarea de realizar malabares con una pasta de pizza?
Ambas requieren un hábil uso de los brazos y las manos. Pero la cuestión se resolvió esta semana, cuando Massimiliano Bacich, campeón mundial de acrobacias con la pizza, le enseñó sus secretos a los pilotos Felipe Massa, Antonio Felix Da Costa y José María "Pechito" Lopez.
El campeón de malabares con pizza encontró una pausa entre los preparativos para la carrera del domingo en el circuito callejero de Roma, donde se llevará a cabo el séptimo Grand Prix de la temporada, marcando exactamente la mitad de la quinta temporada del torneo actual, que inició en diciembre pasado y finalizará en julio en el circuito de Brooklyn, en Nueva York.
Bacich primero enseñó al brasileño Massa y al portugués Da Acosta, líder de la temporada actual, a amasar la pasta para la pizza y después extenderla en un círculo amplio con la ayuda de harina, para obtener por fin la forma deseada.
"La mía va a quedar cuadrada", expresó Massa con una risa a los periodistas que filmaban el encuentro, que después de retirarse de la Fórmula 1 en 2017, firmó un contrato de tres años con el equipo Venturi. El brasileño, que compitió en la máxima categoría del automovilismo con Red Bull-Sauber (2002 y 2003), Sauber (2004) y Ferrari (2006-2013) durante 16 temporadas, fue subcampeón del mundo en 2008 y tercero en 2006.
Con la pizza lista para las acrobacias, Bacich ayudó a Massa y a Da Acosta a hacerla girar sobre sus dedos, como si fuera una pelota de basquetbol, y a levantarla por los aires sin que pierda su forma ni caiga al suelo. "Hay que girar la muñeca, lanzar la pizza y esperarla con los dedos extendidos de la otra mano", explicó Bacich, con una destreza superior a los pilotos.
Posteriormente, y sin ningún éxito en los malabarismos, Massa probó con una pizza hecha de plástico elástico que imita la masa de la pizza, pero no tuvo mejor suerte.
El argentino "Pechito" López se incorporó en el final e intentó con la pizza falsa, pero fracasó en sus intentos de conseguir un malabar decente. "¿Haces la pizza en casa?", preguntaron los periodistas. "No, para nada, yo pido el 'delivery'", expresó López, que con 35 años confirmó su continuidad una temporada más con su equipo de Fórmula E, Dragon Racing.