Este jueves, el centro de los Cheetahs Nicolaas Jacobus Lee fue sancionado con una suspensión de 13 semanas después de"limpiarse el contenido de su nariz" en Colby Fainga'a de Connacht durante un juego de Pro 14 el fin de semana pasado.
El rugbier sudafricano fue citado después del incidente en Galway bajo la Ley 9.27, que dice que un jugador no debe hacer nada que esté en contra del buen espíritu deportivo.
Un comité disciplinario de tres hombres concluyó que Lee había cometido un acto intencional de juego sucio y se le dio la prolongada prohibición que lo excluye de los Cheetahs, con sede en Sudáfrica, hasta el 21 de julio.
Eso significaría que el joven de 24 años se perderá el resto de la temporada de Pro 14, pero tendrá derecho a apelar contra la dura decisión. "Con respecto a la ofensiva, el jugador aceptó que había limpiado el contenido de su nariz en la cara de un jugador oponente, cometiendo así un acto de juego sucio", dijeron los organizadores de la competencia en un comunicado.
Mientras tanto, el panel de especialistas encontró que, "las acciones del jugador son un acto de juego sucio" y que "no tienen lugar en el juego que ellos fomentan"(…) Es difícil imaginar cómo un acto de juego sucio podría ser peor, excepto por los actos repetidos o cuando se produce una lesión real", agregaron.
"De ello se deduce que, por su naturaleza, este acto merece ser castigado. Es contrario al espíritu del deporte", concluyeron.
Después de conocer la penalización en su contra, el equipo del oriundo de Pretoria publicó un video en sus redes sociales en el que se podía ver al jugador pidiendo disculpas tanto a su rival como al mundo del rugby por su "acto de estupidez".
El deportista de 1.80 metros y 89 kilos comenzó su carrera dentro de la disciplina en el Afrikaanse Hoër Seunskool en Pretoria, representando al Free State U19 en la competencia del Campeonato Provincial Sub-21 de 2013.
Tras su buen rendimiento, fue incluido en el equipo Free State XV para la competencia de la Copa Vodacom 2014 y en el mismo año hizo su debut en los Toyota Cheetahs, en donde se ganó la titularidad y el reconocimiento rápidamente.
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