Alrededor de 4.000 efectivos, de ellos 2.054 policías nacionales, conformaron el dispositivo para garantizar la seguridad antes, durante y después del partido de la final de la Copa Libertadores que disputaron el domingo en el Estadio Santiago Bernabéu River Plate y Boca Juniors.
Un partido que reportó a la economía madrileña cerca de 42 millones de euros en ingresos directos y otros 50 millones inducidos por la marca España y la marca Madrid, pero que supuso también un gasto para la administración que ascendió a los cerca de 650.000 euros por el despliegue de la Policía Nacional.
Para que nada enturbie el desarrollo del partido, sus prolegómenos y la celebración posterior, 2.054 policías nacionales, la mitad de Madrid y la otra mitad procedentes de unidades territoriales, contaron con el apoyo de 150 agentes de la Policía Municipal de Madrid y 1.700 efectivos de la seguridad privada, así como los 70 y 80 sanitarios del Samur y Cruz Roja, respectivamente.
Jorge García Castaño, Concejal del Ayuntamiento de Madrid, ha considerado que la Copa Libertadores en la que el River se alzó como ganador tras derrotar a Boca por 3-1, ha sido un "evento positivo tanto para la economía como para la imagen internacional de la ciudad".
"Madrid sabe organizar este tipo de eventos y la ciudadanía sabe convivir con este tipo de eventos", agregó. Lo cierto es que la capital de España consiguió montar un operativo logístico y de seguridad para un duelo de tamaña trascendencia en un tiempo récord.
Madrid no sólo ganó en lo económico, sino también en lo que respecta a su imagen. Tras demostrar estar a la altura, en España ya se rumorea sobre la posibilidad de albergar la Copa del Mundo del 2030, cita mundialista por la que Argentina, Uruguay y Paraguay se habían propuesto para llevarla adelante en conjunto.
"El River-Boca fue un ejemplo de la experiencia de España para organizar grandes eventos deportivos", consideró la presidenta del Consejo Superior de Deportes (CSD), María José Rienda.
"Hemos dado una lección y todo suma. La candidatura con Portugal y Marruecos -para el Mundial 2030- es positiva, todos los eventos deportivos que podamos incluir son muy positivos", detalló la ex esquiadora de 43 años.
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