Luke Shaw arribó al Manchester United como una incipiente figura del fútbol inglés y llamado a ser uno de los pilares defensivos de su combinado nacional por muchos años; sin embargo, una jugada cambió por completo su carrera.
En su vuelta a Los Tres Leones, para disputar la UEFA Nations League, el futbolista realizó una inesperada confesión: casi pierde una pierna en 2015 debido a la dura entrada que recibió por parte del mexicano Héctor Moreno en un partido de Champions League contra el PSV Eindhoven de Holanda.
Esta lesión lo dejó ocho meses fuera de las canchas, pero la situación podría haber sido mucho más grave. "Estaría mintiendo si dijera que nunca he pensado en dejar el fútbol. Pero tengo un montón de buena gente a mi alrededor, familia y amigos que me ayudaron a superarlo. Nadie lo sabe; estuve a punto de perder la pierna", reconoció.
"No lo supe hasta seis meses después, cuando me lo dijo el médico", esbozó el jugador en la concentración de la Selección de Inglaterra, que el sábado recibirá a la España de Luis Enrique en Wembley.
Shaw, que luego de esta lesión sufrió varios problemas físicos, parece haber recuperado la forma. En su relato, el ex Southampton manifestó que la decisión que tomó el cuerpo médico del Manchester United fue clave para conservar su pierna derecha: "En aquel momento, pensaron en trasladarme por aire. Si hubiese volado, probablemente habría perdido la pierna por los coágulos de sangre. Tengo dos cicatrices donde tuvieron que abrir para quitarlos".
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