Este lunes, un comunicado emitido por el club Chongquing Dangdai Lifan, de la Superliga de China, puso en duda el futuro del mediocampista Andrés Iniesta quien ya había decidido no continuar en el Barcelona. El fichaje del jugador español al elenco asiático era un hecho, pero ahora su próximo destino será otro.
Según lo esgrimido por la institución china, el motivo por el que no contratarán al jugador de 33 años es exclusivamente económico: "No iremos en contra de la política de gastos de la Federación, ni vamos a distorsionar el mercado chino".
El club recuerda que todas las inversiones que realizarán serán "racionales" y por eso mantendrán los diálogos con el jugador por negocios extra futbolísticos: "Profundizaremos una cooperación con Andrés Iniesta, pero no se unirá a nosotros en calidad de futbolista".
Iniesta había asegurado que su vínculo con el Barcelona terminaría a final de la temporada, más allá de los esfuerzos del club por retenerlo. Además, había adelantado su llegada a un club en el que no pudiese medirse contra la escuadra catalana.
Iniesta había anunciado su salida del Barcelona en abril
"Es una decisión muy meditada, valorada y pensada por mí y con mi familia. Entiendo que después de 22 años aquí, sé lo que significa ser jugador de este equipo, para mí el mejor equipo del mundo. Por exigencia y siendo honesto, entiendo que mi etapa acaba este año. No podría darle lo mejor de mí en lo físico y mental", había explicado el jugador entre lágrimas, en abril de este año.
Lo llamativo es que hace apenas unos días Gong Daxing, presidente del Chongqinq, había dado por hecha la llegada de Iniesta e incluso ya estaba preparando el escenario para su arribo: "Su llegada será un gran activo para Chongqinq y una bonificación para nuestra marca". Sin embargo, algo hizo dilapidar las negociaciones.
Algo similar sucedió a mediados de marzo, cuando luego de semanas de negociaciones el Tianjin Quanjian, también de la Superliga de China, desmintió la llegada de Iniesta. En ese entonces, el club había señalado como "falsos" los supuestos contactos que de desde España se informaban y había amenazado con denunciar a quien siga dándole lugar a esas noticias.
A partir de ese momento, se conocieron los contactos con el Chongquing Dangdai Lifan, club cuyo 90% corresponde a Desports, empresa que a su vez pertenece en un 49% a Media Base Sports, compañía que controla los derechos de imagen de Iniesta. Ese vínculo, sumado a las declaraciones públicas del presidente de la escuadra asiática, había acrecentado las posibilidades de que el mediocampista arribe allí la próxima temporada, pero ahora todo cambió.
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