Las chances de que el ansiado evento entre el mexicano Saúl "Canelo" Álvarez y el kazajo Gennady Golovkin se lleve a cabo se han desplomado estrepitosamente en las últimas horas. La pelea, que iba a celebrarse el próximo 5 de mayo en el T-Mobile Arena de Las Vegas, ha quedado al borde de la suspensión.
Tras el caso de dopaje positivo por clembuterol del mexicano, quien fue suspendido de forma cautelar por la Comisión Atlética de Nevada, ha complicado el desarrollo de los preparativos para el combate y todo indica que puede ser cancelado hasta nuevo aviso en las próximas horas.
La MGM Resorts International, la empresa que gestiona el T-Mobile Arena, ha decidido ofrecer un reintegro completo de los boletos a quienes prefieran no acudir a la cita. "Si un fanático solicita un reembolso por la pelea Canelo-GGG 2, puede recibir uno en su totalidad en el punto original de compra", expresó un portavoz de la compañía.
El precio de las entradas en reventa va desde los USD 780 hasta los USD 78.000 (lo más caro del ringside), pero esa entradas podría dejar de tener valor alguno si se confirma la suspensión del combate.
Como si fuera poco, la Comisión del Deporte del Estado de Nevada ha abierto un proceso oficial contra el mexicano "Canelo" Álvarez y eso hace que la anulación esté latente. "El uso, ingestión y/o consumo de clembuterol, voluntario o no, constituye una infracción de las reglas antidopaje", señaló Bob Bennett, director de la entidad. El próximo 18 de abril podría conocerse la decisión final.
De esta forma, la revancha entre Canelo Álvarez y Golovkin,quienes ya midieron fuerzas en septiembre de 2017 y terminó en un empate muy controvertido, está al filo de ser suspendida.
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