El astro brasileño Neymar volvió a sonreír después de la estrepitosa caída ante el Real Madrid en el Santiago Bernabéu por el partido de ida de los octavos de final de la Champions League.
El PSG se enfrentó al Estrasburgo por la Ligue 1 y goleó por 5-2 con dos goles de Edinson Cavani, uno de Ángel Di María y otro de Neymar. Julian Draxler completó el marcador para el conjunto parisino.
El ex futbolista azulgrana pareció divertirse durante los 90 minutos en los que realizó fantásticas jugadas y una enorme asistencia, así como también acabó recibiendo una descalificadora patada por parte de un rival.
Neymar, criticado en Madrid por no buscar un juego más colectivo, logró reivindicarse. Empezó con mal pie, al perder el balón que supuso el gol de Aholou, pero se recompuso y fue otra vez diferencial, además de por su gol, que significó el 2-1 y la ventaja de su equipo, también dejó varias jugadas que dieron que hablar.
La Ligue 1 le queda demasiado chico al PSG y por sobre todo a Neymar. Esto hizo en el partido de hoy ante Estrasburgo. pic.twitter.com/bun1lgElq0
— Walter Estigarribia (@Estigarribiapy_) February 17, 2018
El jugador paulista fue participe del segundo gol que convirtió Edinson Cavani, al asistirlo con un magnífico pase desde mitad de cancha, el cual terminó en los pies del uruguayo que terminó definiendo por arriba del arquero rival.
#GolUruguayo ⚽️ Edinson Cavani repite en la red a los 79’. Gran pase de Neymar mejor definición del Salteño para el 5-2. 23 goles por Liga, sexta vez que anota por duplicado. pic.twitter.com/F9PRsPJP4b
— Gonchi Costa (@Gonchi_Costa96) February 17, 2018
Cuando quieres gambetear a todos y llega el que no te aguanta más.#Neymar #PSG. pic.twitter.com/JjZpt8FkbF
— Daniel Arévalo B. (@ArevaloB4) February 17, 2018
En la parte negativa, el PSG concedió dos goles, una situación impensable si quiere tener opciones de lograr el pase en la vuelta de octavos, el 6 de marzo en el Parque de los Príncipes.
No finalizó tan contento como sus compañeros Thiago Silva, que en su regreso al once para disputar su 150º partido en el campeonato se mostró inseguro, dejándose ganar la espalda en varias jugadas.
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