Ha comenzado con la simple filtración de una fotografía íntima entre el presidente de un club de fútbol y uno de los jugadores de la institución, pero con el correr todo se ha complicado aún más. El escándalo sexual en el fútbol paraguayo se ha convertido en un posible caso de trata de personas y la fiscal Teresa Martínez dirigió una allanamiento la sede del club Rubio Ñu para avanzar sobre la investigación de una presunta trama de abusos.
En el allanamiento, se incautaron documentos como fichajes de menores y confiscaron películas con contenido pornográfico, celulares, pen drive, y balas de armas de fuego, según reportes del portal Última Hora. Todo el material será analizado por la Fiscalía.
Martínez comentó que existen otros casos de presunta explotación sexual hacia futbolistas que son investigados por la Fiscalía. "Ya tenemos antecedentes de casos de chicos paraguayos víctimas de trata en el fútbol, en el extranjero y en el país", detalló.
La próxima semana llamarán a declarar a los protagonistas del triángulo amoroso que podría encubrir un delito.
El Ministerio Público de Paraguay decidió abrir una investigación luego de que se revelara la relación amorosa entre el futbolista Bernardo Gabriel Caballero, de 25 años, y el empresario Antonio González, presidente del club Rubio Ñu de la Liga Luqueña de Fútbol, con un tercero en discordia: Valentín Ozuna, agente del jugador.
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