Andy Murray renunció este martes a disputar el torneo de Brisbane, uno de los eventos que inauguran la temporada de tenis y que debía servirle como preparación para el Abierto de Australia, donde su presencia quedó en duda.
"Lamento anunciar que debo retirarme del torneo de Brisbane. Estaba aquí con la firme intención de arrancar con fuerza el año, pero desgraciadamente mi equipo y yo sentimos que todavía no estoy donde debería estar para jugar al más alto nivel", declaró el escocés en un comunicado.
El ex número uno mundial no ha vuelto a disputar un partido oficial desde julio pasado debido a sus repetidos dolores en la cadera. El británico aceptó sin embargo la semana pasada sustituir en el último momento al serbio Novak Djokovic, también lesionado, en el certamen de exhibición de Abu Dabi. Fue en un partido a único set, que perdió por 6-2 ante el
español Roberto Bautista.
Murray, de 30 años y actualmente en el puesto 16 de la clasificación de la ATP, esperaba poder regresar a la competición en Brisbane. "Es realmente desmoralizador constatar que cuando estás en la pista no rindes al nivel necesario para hacer frente a los mejores", explicó en un largo mensaje dirigido a sus fans en Instagram.
"Hace ya mucho que mi cadera me hace sufrir. He consultado con los mejores especialistas y he hecho todo lo que me recomendaron para ponerme bien", explicó el tenista. "Entre las opciones que me quedan está seguir reposando y dar más tiempo a mi cadera para recuperarse. También puedo plantearme una operación, pero las opciones de que funcione no son tan buenas como podría desear. Eso sigue siendo para mí una segunda opción y espero no tener que recurrir a ella", añadió.
Murray tiene previsto permanecer en la ciudad australiana para entrenarse con miras a recuperar su mejor nivel. En su comunicado no precisa si podrá jugar el primer Grand Slam del año, que se disputará del 15 al 28 de enero en Melbourne. Dejó incluso planteada la incógnita al señalar que "de aquí a este fin de semana" tomará la decisión de si seguir allí o no. Si no se siente mejor, dijo que volverá "a casa para decidir cómo continuar", concluyó.
¿Nadal y el resto?
El británico es la segunda baja de peso del torneo de Brisbane, después de la del español Rafael Nadal, número uno mundial, que también renunció a participar por falta de preparación tras sus problemas de rodilla.
Rafa ya había renunciado al campeonato de Abu Dabi, aunque en principio su participación en el Abierto de Australia sigue adelante. La estrella del tenis español tuvo un 2017 espectacular, que le permitió ganar Roland Garros y el Abierto de Estados Unidos y regresar así al número 1 del ranking.
Sin embargo, no compite desde la lesión de rodilla que le obligó a abandonar en noviembre en el Masters de Londres. Además de Nadal y Murray, otras figuras del tenis que comienzan el 2018 con problemas físicos son Novak Djokovic (probable baja en Australia), Stan Wawrinka, Kei Nishikori y Jack Sock.
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