Este jueves, en un evento celebrado en Buenos Aires, la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) anunció el arribo de la tecnología a sus dos competiciones más importantes: la Copa Libertadores y la Copa Sudamericana. En la primera de ellas se implementará a partir de las semifinales, que se disputarán la próxima semana, y en la segunda solamente en las finales.
La Conmebol se convirtió en la primera Confederación en adoptar el sistema, aprobado por la IFAB (International Football Association Board) y reglamentado por la FIFA, que ya se utilizó en competiciones internacionales tales como el Mundial Sub 20 2017 y la Copa Confederaciones Rusia 2017.
El VAR, cuya sigla refiere a Asistencia Arbitral de Video, está conformado por tres personas que desde una cabina en el estadio estarán analizando el partido a través de las cámaras de televisión. Los tres son árbitros y uno de ellos es especialista en fuera de juego.
La terna estará chequeando todo el partido, pero sólo intervendrá en cuatro circunstancias: goles, penales, expulsiones directas (no por doble tarjeta amarilla) o confusión de identidad. Tanto para convalidar una acción como para modificarla por un error, de ser necesario.
Cabe destacar que el VAR mantendrá un diálogo directo con el árbitro principal, quien puede solicitar la intervención del sistema para tomar una decisión o el propio VAR señalarle a él algún error en sus fallos. Una relación similar a la que posee con los asistentes dentro del campo de juego. El juez sigue siendo la máxima autoridad dentro del terreno de juego, es decir, que puede desoír al VAR en caso de que confíe en su poder decisión.
La Asistencia Arbitral de Video observará el partido gracias a la ayuda de la televisión, que le brindará acceso a todas sus cámaras. Además, podrá utilizar las imágenes a su gusto, es decir, utilizando la cámara lenta, haciendo zoom o modificando el ángulo, en caso de que lo considere necesario.
Si el árbitro desconfía del VAR, podrá detener el juego y revisar él mismo la jugada en el "área de revisión", que estará a un costado del terreno de juego. No hay tiempo estimado para analizar la polémica y todos los minutos que se tomen serán agregados en el tiempo adicionado, una vez que se cumplan los 90 minutos.
Siempre que el VAR intervenga, el referí deberá realizar el gesto con sus manos (como si estuviera recorriendo el marco de una pantalla con sus dedos índices) y el juego se detendrá. La reanudación se realizará con la infracción sancionada, o en caso de que no exista falta alguna, con un bote a tierra.
Esta incorporación es parte de un "período experimental", por lo que se desconoce si para las próximas ediciones de la Copa Libertadores y de la Copa Sudamericana se volverá a utilizar.
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