Con la obligación de ganar para no ceder terreno en la Liga de las Estrellas, el Real Madrid se presentó en Coliseum Alfonso Pérez para enfrentar al Getafe, un equipo que tiene como objetivo evitar el descenso.
A pesar de las ausencias de Keylor Navas, Gareth Bale, Daniel Carvajal y Kovacic, la diferencia de intérpretes entre los equipos hacía suponer un claro dominio merengue. La combinación entre Benzema y Cristiano Ronaldo que hizo lucir a Guaita fue un claro ejemplo de la superioridad de la Casa Blanca.
Además, la baja de Álvaro Jiménez, quien tuvo que ser reemplazado a los 15 minutos por Portillo, debilitó considerablemente al combinado de José Bordalás. Por lo tanto, unos instantes antes de que llegue el descanso, una individualidad del goleador francés fue suficiente para que el elenco de Zidane se ponga en ventaja. La resolución de la escena con su disparo rasante dejó sin posibilidades al ex arquero del Valencia.
Sin embargo, en el complemento el dueño de casa sorprendió con un contragolpe perfecto. La sociedad conformada entre Ndiaye y Jorge Molina descolocó a la desconcentrada defensa visitante y el experimentado atacante de Alcoy emparejó las acciones. La desconsolada mirada de Kiko Casilla impuso una carga emotiva en el soleado escenario capitalino.
Como no podía ser de otra manera, tuvo que aparecer Cristiano Ronaldo para que el Real Madrid se lleve los 3 puntos para su casa. A falta de 5 minutos para el cierre del cotejo, el portugués dominó con el pecho y selló la ajustada victoria blanca. A pesar de la floja producción, en la Cibeles habrá motivos para festejar.
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