Quién es el principal acusado por la tragedia de Hillsborough

El ex policía estuvo a cargo del operativo policial en la semifinal de la FA Cup de 1989 entre Liverpool y Nottingham Forest en donde 96 personas murieron aplastadas en medio de una avalancha. La Justicia encontró pruebas de su negligencia

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Rescatistas ayudan en el estadio
Rescatistas ayudan en el estadio de Hillsborough en Sheffield, el 15 de abril de 1989, cuando 96 hinchas del Liverpool murieron aplastados y cientos resultaron heridos luego de que las barandas de contención se derrumbaron durante una semifinal de la FA Cup entre Liverpool y Nottingham Forest

El 15 de abril de 1989 ocurrió en Sheffield, Inglaterra, la tragedia de Hillsborough. Ese día, en el estadio que lleva el nombre del lamentable suceso, 96 hinchas del Liverpool murieron aplastados en medio de una avalancha que hizo ceder las vallas del recinto donde se iba a disputar la semifinal de la FA Cup. El hombre que estaba a cargo del operativo de seguridad era David Duckenfield (72), un policía que en 2015, 26 años después de lo ocurrido, confesó que había mentido en todas sus declaraciones y a que hoy la Justicia de Inglaterra oficializó como el principal acusado.

David Duckenfield
David Duckenfield

Pesa sobre Duckenfield la muerte de 95 personas, falso testimonio y encubrimiento, y será juzgado desde el próximo 6 de agosto junto a otras cinco personas, todas afectadas al operativo de seguridad de aquel partido. El acusado fue excluido, en tanto, del juicio por la muerte de la 96° víctima, Tony Bland, quien murió cuatro años después del incidente, según los fiscales.

Los 96 muertos en la
Los 96 muertos en la tragedia de Hillsborough

El principal acusado estaba a cargo de la seguridad del partido entre el Liverpool y el Nottingham Forest, y en 2015 admitió que no había contado toda la verdad sobre los errores que cometió el día de la tragedia. "Ahora soy mucho más viejo, mucho más prudente y puedo comprender mucho mejor los acontecimientos del día. He decidido contar toda la verdad", expresó entonces y añadió que tomó la decisión de sincerarse luego de verse afectado por un documental sobre lo ocurrido, en el que una madre abrazaba a su hijo fallecido en el piso del gimnasio del estadio, utilizado como depósito de cadáveres.

Los 96 fallecidos tenían entre 10 y 67 años y murieron como consecuencia de la avalancha producida por la permisividad de los policías al ingreso del público sin límite. Cabe mencionar que en la FA Cup, tanto las semifinales y la final se juegan a partido único y en cancha neutral. Las pericias indicaron que aquel 15 de abril de 1989 hubo el doble de personas de lo permitido en la mayoría de los sectores del estadio del Hillsborough, en Sheffield.

Apenas transcurridos cuatro minutos de partido, la policía advirtió que la tribuna del Liverpool estaba por colapsar cuando ya se veía a algunos hinchas aplastados contra las rejas que los separaban del campo de juego y, previa orden de detener el encuentro cuando se jugaba el minuto 7, dispuso la apertura de las pequeñas puertas de entrada a la cancha. Allí todos se agolparon para escapar y el resultado de la negligencia policial fue la muerte de 96 personas.

Una imagen contundente del colapso
Una imagen contundente del colapso en la tribuna de los hinchas del Liverpool en la semifinal de la FA Cup de 1989

En sus distintas declaraciones Duckenfield mencionó que había cumplido con el protocolo de seguridad, señaló que los hinchas de Liverpool acostumbraban a ingresar a los campos de juego alcoholizados y a causar desmanes y mencionó el nombre de algunos de sus compañeros en el operativo como responsables. Las investigaciones judiciales demostraron, sin embargo, que el agente tenía escasa o nula experiencia en partidos de alto riesgo, que aún cuando la gente caía desvanecida o incluso muerta, ordenó el ingreso de los perros policías para reprimir a los hinchas, en lugar de llamar a las ambulancias y que no limitó el ingreso de espectadores sino todo lo contrario.

Una vez que esto se conoció, Duckenfield argumentó que sufrió de estrés postraumático, que se escondió en distintos lugares de Inglaterra y que "no podía soportar escuchar la palabra Hillsborough". Agregó también que sólo pudo enfrentarse a la verdad con la ayuda de profesionales de la salud.

El 12 de septiembre de 2012, un informe posterior a la investigación de seis jurados independientes concluyó que la tragedia no se produjo por el accionar violento de los hinchas, como había quedado establecido liego de las primeras actuaciones de la Justicia, sino por la negligencia en el accionar policial antes, durante y después del partido. Del escrito se desprende que "hasta 41 de los muertos podrían haber sobrevivido si hubieran recibido atención de emergencia adecuada".

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