Los New York Knicks de la NBA tomaron una polémica decisión en la última jornada de la liga: silenciar el Madison Square Garden de música videos y cualquier tipo de sonido.
Antes del inicio del encuentro ante Golden State Warriors, a través del videomarcador, la franquicia informó esta decisión a los fanáticos, quienes no tomaron nada bien esta medida.
"La primera mitad del juego de hoy será presentada sin música, video o entretenimiento, así podrán experimentar el juego su forma más pura. Disfruten de los sonidos del partido", explicaba un texto a través de las pantallas, mientras los jugadores hacían el calentamiento previo.
"Uno se acostumbra a jugar de cierta manera, y esa decisión afectó. Fue una decisión irrespetuosa para todos, en especial para esas personas que han hecho cosas para llevar este juego a la categoría de entretenimiento", argumento un furioso Draymond Green.
El alero de los Golden State Warriors continuó: "Fue patético y ridículo. Cambió el aire del partido… ¡lo cambió todo!" y agregó que "la música le otorga al juego vibración. Ha sido una gran falta de respeto".
Steve Kerr, entrenador del conjunto de Oakland, reconoció que "fue raro", mientras que Stephen Curry, quien aportó 31 puntos en la victoria por 112 a 105, reveló que empezaron a hacer ruidos y cantar para suplir la ausencia de la música. "Fue algo así como volver a los entrenamientos del instituto", comparó.
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