El alumno que logró llegar a la final con su maestro: la historia de los dueños de los Patriots y los Falcons

En 1978, Arthur Blank, un licenciado en administración de empresas neoyorquino, se quedó sin trabajo. Tenía 36 años, vivía en Atlanta. Era empleado en una famosa tienda de ferretería de la época llamada Handy Dan. Su amigo "Bernie", nacido en Rusia, hijo de inmigrantes judíos en Estados Unidos, también estaba entre los trabajadores cesados. Aquella temporada, Atlanta Falcons, el equipo de fútbol americano la ciudad, se clasificó por primera vez en su historia a los playoffs de la NFL.

Así empieza la historia del éxito de la franquicia. A un año de quedar desocupados, Arthur Blank y Bernard Marcus fundaron Home Depot, una compañía que creció monstruosamente en el rubro del mejoramiento del hogar y los materiales de construcción. Para 1990, Handy Dan -la empresa que despidió a Blank y Marcus- llevaba un año fuera del mercado. Home Depot, en cambio, tenía 145 tiendas, 21.500 asociados y facturaba 3800 millones de dólares.

Cómo Arthur Blank pasó de fanático a dueño de los Atlanta Falcons

Cuando el entrenador Dan Reeves llevó a los Falcons a jugar su primer –y hasta este año única- Super Bowl en 1999, Blank ya era multimillonario y fanático del equipo de la ciudad en la que gestó su éxito. Pagaba su abono cada temporada. Sufrió en la definición por el título de campeón como cualquier otro aficionado. Ese año cayeron derrotados ante Denver Broncos por 34–19 en Miami. La franquicia de Atlanta alternaba entre temporadas esperanzadoras y campañas desastrosas, pero él era un fiel seguidor. Más aún luego de retirarse de su empresa en 2001, cuando ejercía de co-presidente.

Su paciencia de magnate dedicado al ocio duró menos de un año. Se cansó de que su equipo sea una montaña rusa de emociones sin rumbo. Arthur Blank se convirtió en el dueño de los Atlanta Falcons a cambio de 545 millones de dólares. No sabía nada sobre gestión deportiva, pero tampoco iba a permanecer en la grada quejándose sin hacer nada. Y vaya que logró cambiar la realidad del equipo.

Bajo su mandato, la franquicia logró obtener rondas de draft altas, mediante traspasos y pactos, y así se reconstruyo el equipo: los Falcons han llegado a los playoffs seis veces en 15 temporadas. Tres años antes de su desembarco, el club promediaba 37.000 abonados por año. Con él en las oficinas, nunca han vendido menos de 50.000 abonos por temporada. 

En mayo de 2014, se inició la construcción del Mercedes-Benz Stadium, que quedará terminado en los próximos meses. No solamente será la casa de los Falcons, también será utilizado por el Atlanta United FC, el nuevo equipo de la liga estadounidense de fútbol creado por el propio Arthur Blank.

Robert Kraft, dueño de los Patriots y gurú de Blank

El gran consejero de Arthur Blank para conseguir el éxito en el mundo del deporte fue uno de los empresarios más experimentados en la materia: Robert Kraft, justamente dueño de los New England Patriots, rival de los Falcons en el Super Bowl LI que se disputará este domingo en Houston.

Kraft es dueño de los Patriots de la NFL y también es propietario de los New England Revolution, equipo que integra la MLS desde 1995. Ambos utilizan el Gillette Stadium, un estadio que él construyó en 2002. La idea, evidentemente, sirvió de inspiración para el proyecto de Blank en Atlanta.

En diciembre de 2001, cuando el empresario de Atlanta era inexperto en gestión deportiva, invitó a desayunar al propietario de los Patriots. Aquella mañana, el mejor consejo que le dio Kraft a Blank fue que llevara el club como había dirigido su negocio. Aunque le hizo una advertencia sobre los medios de comunicación.

"La único que me dijo que sería diferente eran los medios de comunicación. Me miró, sonrió y dijo: 'No lo entiendes ahora, pero lo harás'. Y tenía razón. Hay docenas de reporteros siguiéndote cada día. O les das contenido o lo crean, porque tienen trabajo que hacer. Tienen que escribir algo. Por lo tanto, tenemos una gran cantidad de historias y nos aseguramos de darles contenido. Tenemos una relación muy transparente con los medios de comunicación", contó Arthur Blank en una entrevista exclusiva con la cadena FOX.

El dominio mediático fue la frutilla del postre y Arthur Blank consiguió que los Atlanta Falcons, a los que siguió como un fiel fanático, se transformen en la franquicia que él tanto quería. Llegaron al Super Bowl, uno de los eventos deportivos más importantes del mundo, donde estará en juego un nuevo título de la NFL. Enfrentará a los Patriots de Robert Kraft, quien fue su gran consejero.

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