Los 50 años del golpe de Estado de Pinochet y la muerte de Salvador Allende se reflejan en numerosas novedades de ficción, tales como la última película de Pablo Larraín o una novela de Ariel Dorfman, que se unen a clásicos como las obras de Costa-Gavras o Roberto Bolaño.
Larraín acaba de ganar el premio a “Mejor guión” en el Festival de Venecia con El conde, una sátira en la que retrata a Augusto Pinochet como un vampiro y que cuenta en su elenco con Alfredo Castro, que a su vez protagoniza la serie Los mil días de Allende”(estrenada esta semana en la televisión chilena) en la que encarna al que fuera presidente de Chile hasta aquel aciago 11 de septiembre de 1973.
Entre las novedades escritas, Allende, una novela en cinco actos, del chileno Carlos Tromben; Salvador Allende. Biografía política, semblanza humana del español Mario Amorós, que analiza los mil días del Gobierno de la Unidad Popular, o Allende y el museo del suicidio, de Ariel Dorfman.
Precisamente Dorfman, que fue asesor cultural del Gobierno de Allende, ya había unido literatura y cine en torno al golpe de Estado. Es autor de la famosa obra teatral La muerte y la doncella (1990), sobre el encuentro de una víctima con su torturador, un texto que llevó al cine Roman Polanski en 1994, con Sigourney Weaver en el papel de Paulina, la mujer torturada y violada.
“Missing”, “No” y “Los perros”, desde el cine
La muerte y la doncella es, probablemente, la más conocida de las obras que llevaron a la ficción –aunque con muchos elementos reales– el golpe de Estado y sus posteriores consecuencias, pero en el cine han habido otras películas igualmente destacadas:
- No (2012), de Pablo Larraín.
Larraín es uno de los cineastas chilenos más conocidos internacionalmente, y en varias de sus películas ha sobrevolado la figura de Pinochet. Antes de la reciente El conde estrenó No, sobre el plebiscito que sacó al dictador del poder, con la que cerró una trilogía sobre la dictadura chilena que empezó con Tony Manero (2008) y Post Mortem (2010).
- Los perros (2017), de Marcela Said.
Alfredo Castro, protagonista de estas dos últimas películas encabeza también esta cinta que se llevó el Goya a la mejor cinta iberoamericana, en el papel de un ex militar investigado por abusos de derechos humanos durante el pinochetismo.
- 1976 (2022), de Manuela Martelli.
La actriz Manuela Martelli, en su debut como directora, se mete en los primeros años sombríos de la dictadura con un complejo thriller político que se llevó el Platino a mejor ópera prima.
- Missing (1982), Costa Gavras.
Inspirada en el caso real de la desaparición y muerte del periodista estadounidense Charles Horman, el realizador franco-griego puso su talento al servicio de la película que dio a conocer internacionalmente las violaciones de derechos humanos de Pinochet. El guion se llevó un Oscar y los protagonistas, Jack Lemon y Sissy Spacek, sendas nominaciones.
- Patricio Guzmán, el documentalista de la historia chilena.
Detenido tras la llegada de Pinochet al poder, Guzmán se exilió en París y desde allí construyó una carrera dedicada a contar y denunciar lo ocurrido en su país.
Desde las tres partes que componen la mítica La batalla de Chile (1975-1979) a Chile, la memoria obstinada (1997), El caso Pinochet (2001) o la trilogía Nostalgia de la luz (2010), El botón de nácar (2015) y La cordillera de los sueños (2019), Guzmán ha sabido usar la poesía visual para contar los descarnados efectos de la dictadura.
Bolaño, Guelfenbein y Allende: la literatura sobre Chile
Y no menos numerosas son las novelas que con más o menos datos reales conforman la literatura producida en torno a Allende y Pinochet.
- Roberto Bolaño, Estrella distante (1996) y Nocturno de Chile (1999).
Una de las obras claves es Estrella distante, en la que Bolaño reflexionó en la distancia (vivía en España) sobre el mal instalado en su país a través del protagonista, Carlos Wieder, un piloto de la Fuerza Aérea de Chile que simula ser un poeta que escribe sobre asesinatos y desaparecidos.
En Nocturno de Chile utiliza el monólogo de un sacerdote que ha tenido un papel destacado a favor del dictador y ahora quiere limpiar su imagen para adentrarse en un cuadro de terror que es la dictadura de Pinochet. Con dos personajes importantes en la narración llamados Oido y Odeim (Odio y Miedo).
- Nadar desnudas (2012), de Carla Guelfenbein.
La escritora chilena salda la cuenta pendiente de escribir una historia ambientada en el Chile de su infancia. Un libro sobre los últimos días del gobierno de Allende y los primeros de la dictadura, una época convulsa en los que la escritora sufrió la desaparición de su madre durante tres semanas.
- De amor y de sombra (1994), de Isabel Allende.
Sobrina de Salvador Allende, la escritora chilena más conocida internacionalmente cuenta en De amor y de sombra una historia de amor en el contexto de la dictadura. El libro fue llevado al cine en 1995 con Antonio Banderas y Jennifer Connelly como protagonistas.
- El caso Neruda (2008), de Roberto Ampuero.
Una novela policíaca de la serie de Ampuero protagonizada por el detective Cayetano Brulé, que recuerda cómo en agosto de 1973 conoce en una fiesta a Pablo Neruda, que lo involucra en una investigación mientras el ambiente en Chile se hace cada vez más tenso y peligroso.
Y aunque no llegó a escribir un libro –falleció apenas 12 días después del golpe–, Pablo Neruda alcanzó a redactar un breve texto tres días después del bombardeo del Palacio de Gobierno.
“A reglón seguido del bombardeo aéreo entraron en acción los tanques, muchos tanques, a luchar intrépidamente contra un solo hombre: el Presidente de la Republica de Chile, Salvador Allende, que los esperaba en su gabinete, sin más compañía que su corazón, envuelto en humo y llamas”.
Fuente: EFE.