La ministra británica de Cultura, Michele Donelan, descartó el miércoles cualquier posibilidad de devolver a Grecia los mármoles del Partenón, negando informaciones de prensa de que el Museo Británico de Londres, donde están expuestos, está ultimando un acuerdo con las autoridades de Atenas.
“He sido muy clara al respecto, no creo que [los mármoles] deban volver a Grecia”, declaró a la BBC. “No debemos devolverlos, y de hecho pertenecen al Reino Unido, donde nos hemos ocupado de ellos durante mucho tiempo”, añadió.
Donelan le dijo a la radio de la BBC que un acuerdo supuestamente negociado por el presidente del Museo Británico, George Osborne, no se refería al regreso permanente a Grecia de las esculturas antiguas.
Esa “no era su intención”, dijo Donelan refiriéndose a Osborne, ex ministro de Finanzas bajo el ex primer ministro David Cameron.
Tal movimiento “abriría una lata de gusanos” y “abriría la puerta de entrada a la cuestión de todo el contenido de nuestros museos”, dijo.
Las esculturas, también conocidas como Mármoles de Elgin, fueron tomadas del templo del Partenón en la Acrópolis de Atenas a principios del siglo XIX por el diplomático británico Thomas Bruce, conde de Elgin.
Según los informes, se han estado llevando a cabo conversaciones secretas entre Osborne y el primer ministro griego Kyriakos Mitsotakis durante un año.
El acuerdo informado, en realidad un acuerdo de préstamo, podría hacer que las antigüedades de 2.500 años sean devueltas “más temprano que tarde”, dijo el periódico Daily Telegraph a principios de este mes citando fuentes.
Tal arreglo podría eludir la prohibición legal de que el museo divida su vasta colección.
“Los museos no pueden devolverlos (artefactos) legalmente de forma permanente, con lo que estoy completamente de acuerdo”, dijo Donelan al podcast de The News Agents por separado.
“Mucha gente ha hablado de un préstamo a 100 años, lo que no creo que esté en absoluto en el espíritu de la legislación”, dijo, y agregó que esto no era lo que Osborne planeaba hacer.
El Reino Unido no quería regalar artículos que se habían convertido en “bienes nacionales... vistos por personas de todo el mundo” y que el país había tenido “mucho cuidado en preservar”, agregó.
Tomada por Elgin cuando era embajador británico en el Imperio Otomano, Grecia sostiene que las canicas fueron robadas y ha hecho campaña durante mucho tiempo para su devolución, mientras que el Reino Unido sostiene que se obtuvieron legalmente.
Su regreso sigue siendo un tema muy delicado, ya que la vasta colección del Museo Británico incluye muchos artículos que ahora otros países consideran botín de los constructores del Imperio Británico y el gobierno desconfía de sentar un precedente.
(Con información de AFP)
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