En una ceremonia celebrada en Palacio Nacional de México, Luisa Valenzuela recibió, en manos de Andrés Manuel López Obrador, el prestigioso Premio Carlos Cifuentes 2019. La escritora y periodista argentina se quedó con el galardón otorgado por la Secretaría de Cultura de México y la Universidad UNAM (La Universidad Nacional Autónoma de México) por “la agudeza de su obra y genio narrativo”. El Presidente mexicano subrayó lo destacado por el jurado.
“Es un orgullo tan grande, tan enorme, porque amo a México y lo que siento en estos momentos, pues lo he sentido muchas veces, es esta reciprocidad que tengo de amor con este país, que es realmente mi país favorito del mundo. Muchas gracias por este premio y muchas gracias por la hospitalidad que me han brindado”, dijo frente al público con un dejo de emoción.
No caben dudas acerca de esta distinción, la carrera de Valenzuela es enorme. Ha publicado innumerable cantidad de libros y ha sigo distinguida con muchísimos premios. ¿Por dónde empezar? Se crió en una casa llena de autores. Su madre, Luisa Mercedes Levinson, era escritora y la visitaban Adolfo Bioy Casares, Jorge Luis Borges y Ernesto Sabato, entre otros. Su destino fue inevitable: a los 17 años comenzó a publicar en diversos periódicos y a trabajar en radio. La cultura era lo suyo.
Enseguida llegó su primera novela, Hay que sonreír, y desde entonces no paró. Escribió Novela negra con argentinos, Cuidado con el tigre, Donde viven las águilas y El chiste de Dios, entre tantos otros libros. Vivió en México, también en Francia y España. Fue censurada por la dictadura militar argentina y en 1979 se trasladó a los Estados Unidos, donde permaneció 10 años.
Fue becaria de Fulbright para la Universidad de Iowa, de Guggenheim y del Fondo Nacional de las Artes, y Escritora en Residencia en el Center for Interamerican Relations y en las universidades de Nueva York y Columbia, donde durante diez años dictó diversos seminarios y talleres de escritura. En 2017 la Universidad Nacional de San Martín le otorgó el título de doctora Honoris Causa. Actualmente dirige PEN Argentina.
Días antes de recibir este premio, pero ya habiéndose anunciado que ella era la ganadora, dijo en una entrevista: “El premio Fuentes fue una real sorpresa, magnífica por cierto. Es doblemente importante para mí: por su importancia y porque rubrica mi inmenso amor por México y mi amistad y profunda admiración que sentía por ese inmenso escritor”.
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