Desde Madrid
El escritor argentino Patricio Pron ha sido galardonado con el Premio Alfaguara de novela 2019 dotado con 175.000 dólares (unos 154.000 €) y una escultura de Martín Chirino por la obra Mañana tendremos otros nombres presentada con el título El museo de las relaciones rotas y bajo el seudónimo No soy Stiller.
El jurado, presidido por el escritor Juan José Millás y compuesto por los escritores Manuel Vilas, Jorge Fernández Díaz, la editora sueca Gunilla Sondell, la directora de la librería Oletvm de Valladolid, Estrella García y Pilar Reyes (con voz pero sin voto) directora editorial de Alfaguara ha destacado la actualidad de la temática de la novela y Millás no ha escatimado elogios al añadir que "esta es una novela excelente que quizás el tiempo convierta en una obra maestra".
Esta vigésimo segunda edición del premio ha sido además un emotivo recuerdo a la figura del recién fallecido editor editorial de Penguin Random House, Claudio López Lamadrid una de las grandes referencias de edición en español a ambos lados del Atlántico. Su apuesta por la literatura latinoamericana le llevó no sólo a trabajar estrechamente con el escritor colombiano Gabriel García Márquez sino a apoyar a autores como Samantha Schweblin, César Aira, Fernanda Melchor o la obra de los premio Nobel V.S Naipul, J.M Coetzee y Orhan Pamuk.
Esta novela de Patricio Pron, un texto sutil y sabio, así la ha calificado el jurado, encierra un gran calado psicológico y nuevas formas de entender los afectos en la era de Tinder.
En palabras del escritor madrileño Juan José Millás, trata sin nombrarla, de una rata, la del capitalismo financiero que se manifiesta a través de sus víctimas y es también una novela de terror cuyos protagonistas no tienen nombre, son " él" y "ella" y el resto de los personajes tan solo se nombran con una inicial.
"Hay escritores que en cada novela, rellenan huecos que faltaban en las anteriores y yo hago lo contrario, despojo a cada novela de lo que le sobraba en la anterior y en las anteriores sobraban los nombres además, los nombres que son habituales en España, no lo son en América Latina y viceversa" explicaba Pron además de avanzar este mediodía (hora española) en el transcurso del almuerzo en el céntrico hotel Palace de Madrid, en el que se han reunido periodistas culturales, escritores y editores que esta novela habla de cómo el concepto de amor está cambiando como no lo había hecho en mucho tiempo.
"Mi apuesta ha sido tratar de imaginar un final feliz". El tema de la duplicidad, bastante habitual en las novelas de Pron, surge también en esta ocasión "porque no hay duplicidad mayor que dos personas que conforman una pareja" ha añadido con humor el escritor argentino. El otro escritor argentino presente en la sala y miembro del jurado, el escritor, periodista y académico Jorge Fernández ha destacado que "esta es una novela psicológica y mental en la que hay un cadáver. Ese cadáver es el amor. También hay una ruptura y carece casi de diálogo aunque parce muy hablada".
Al final del discurso, Pron, quiso agradecer el premio a su esposa, a tres mujeres de las que ha dicho Pron que ha aprendido mucho y las tres mejores profesionales con las que ha trabajado: María Carmona, Florencia Ure y María Casas y a los periodistas que en el último año han perdido su trabajo "porque sin buen periodismo, las instituciones democráticas se deterioran" Pron no ha olvidado a los once periodistas asesinados en México en el último año y el último agradecimiento y tal vez el más emotivo ha sido para Claudio López Lamadrid "por ser el principal valedor de mi trabajo en España. Este premio es de Claudio y para Claudio".
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