Una de las grandes apuestas del actual Gobierno nacional es la Paz Total. Desde su campaña rumbo a la presidencia, el ahora mandatario Gustavo Petro ha insistido en la necesidad de establecer diálogos de paz con algunas estructuras insurgentes, como el ELN, pero también de aplicar medidas de sometimiento a la justicia para grupos dedicados al narcotráfico, como las Autodefensas Gaitanistas de Colombia —Clan del Golfo— o Los Pachenca.
En esa medida, el presidente de la República le agradeció a su homólogo, Gabriel Boric, el respaldo que este le ha mostrado alrededor de la Paz Total, entendida ahora como política de Estado. En esa medida, ambos mandatarios firmaron una declaración conjunta para trabajar de la mano no solo en la consolidación de esta ley, sino para afianzar una nueva política antidrogas y, en esa medida, mayores acuerdos de seguridad binacional.
Dicho documento manifiesta que los jefes de Estado de ambos países “compartieron el interés mutuo de revitalizar y expandir su alianza histórica y profunda amistad, con miras a enfrentar los desafíos actuales y proyectar hacia el futuro todo el potencial de la relación bilateral, en el año en que se celebran los 200 años de relaciones diplomáticas entre ambos países”.
Dentro de sus agradecimientos hacia Chile, Petro reconoció que ese ha sido el único país de Latinoamérica de cooperar a través de múltiples mecanismos internacionales, como el Fondo Multidonante de Naciones Unidas para el Sostenimiento de la Paz en Colombia y el Fondo de la Unión Europea para la Paz en Colombia. De paso, mencionó que esa es la única nación observadora dentro del Grupo de Cooperantes de Colombia desde noviembre de 2019.
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También destacó el papel que ha tenido como país garante en los diálogos de paz adelantados con el ELN y, en ese orden, la declaración conjunta estableció que la Paz Total del Gobierno nacional está “orientada a desarrollar iniciativas de diálogo y construcción de paz con los diferentes actores del conflicto armado y otras violencias, con el objetivo de transformar las condiciones de vida de las personas y las comunidades en los territorios”.
Otro tema relevante fue la urgencia, planteada por Petro y Boric, en replantear la lucha contra las drogas y reconocieron como “insuficientes” los mecanismos actuales y el paradigma tradicional relacionado con el abordaje del problema mundial de las drogas ilícitas.
“Es necesario abordar el fenómeno con un enfoque integral, multidisciplinario y equilibrado, bajo el principio de la responsabilidad común y compartida, basado en evidencia científica, en los Derechos Humanos, en la protección medioambiental y con un enfoque de salud pública”, expresa también la declaración conjunta firmada por ambos presidentes en el Palacio de la Moneda.
Sobre esto, plantearon que es necesario mantener un equilibrio de esfuerzos entre toda la comunidad internacional y recordaron que este año se llevará a cabo en Colombia la VIII reunión de la Comisión Mixta de Cooperación Mutua para la Prevención del Uso Indebido y Control del Tráfico Ilícito de Estupefacientes y Sustancias Psicotrópicas. En materia de derechos humanos, la declaración conjunta enfatiza en que se debe reforzar la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y la Corte IDH.
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