El wifi tiene un valor intransigente a simplemente el uso de un sistema o el privilegio de un servicio. Es más, un derecho fundamental y el nuevo protagonista del impacto social. En la pandemia del covid-19, los colombianos se dieron cuenta de su significado real, el de ser una herramienta que transforma la forma en la que se vive, trabaja, estudia o comunica con otros, sin dejar de lado que resultó como el salvavidas para resolver trámites financieros como el acceder a una cuota de auxilio o retirar la pensión, y también representó un espacio para poder prestar atención médica.
Lo cierto es que este escenario de aislamiento permitió aumentar el uso del internet entre un 50 % y 70 %. Algo que también se puede evidenciar en la última edición del informe hecho por Hootsuite y We Are Social, en donde se señala que el número de usuarios de internet en el mundo alcanzó los 4.950 millones de personas, lo que representó el 62,5 % de la población mundial; mientras que en el 2019 se contaba tan solo con 4.388 millones de internautas.
Ante esto, el gerente de ventas y estratega de negocios para América Latina de Datawifi, Alejandro Duarte Camacho, afirmó que para cerrar las brechas digitales en Colombia se requiere de transformar y mejorar las tecnologías de conectividad en poblaciones rurales.
Y es que queda claro que la inclusión financiera no solo significa dar cobertura a una cabecera municipal, sino de en verdad, generar una estrategia pública que fomente una inclusión digital de forma sostenible. Hace poco, el Ministerio de Tecnologías de la Información y Comunicaciones (MinTIC) encontró que la velocidad de descarga de una conexión de internet en un hogar de estrato seis es de 66,7 megabits por segundo (Mbps), o sea, es 9 veces más rápida que una conexión a internet de un hogar de estrato uno, que es de 7,2 Mbps.
“Esto es un dato clave porque da cuenta de una realidad, y es que no solo se trata de tener una conexión a internet, sino de poder tener un wifi más veloz y que se alinee con las necesidades que tienen los usuarios. Alcanzar algunos objetivos en la materia no solo representará atender un rezago importante en materia de inclusión digital, sino que es un factor clave en el crecimiento del PIB nacional sin dejar de lado que ofrece nuevas oportunidades de desarrollo en áreas como educación, salud, gobierno y transporte”, afirmó Duarte Camacho.
Esto, también fue una de las conclusiones a las que llegó el Centro de Investigaciones para el Desarrollo de la Universidad Nacional, en donde descubrió que una mayor conectividad y cobertura de servicios móviles impactan de manera positiva al crecimiento económico de un país. De acuerdo con la misma, un crecimiento del 10 % en la penetración de la conectividad de alta velocidad hizo crecer el PIB en 1,6 % entre 2012 y 2018.
Mayor relevancia
Cada día el wifi adquiere una mayor relevancia en Latinoamérica, ya que quienes no tienen Internet estarían en una gran desventaja económica y social, pues no les permite acceder a su derecho fundamental a estar informados, trabajar, estudiar y lograr una vida digna.
El directivo explicó que para que en verdad genere un impacto positivo en diferentes comunidades se debe reforzar con otro tipo de estrategias en las que se contemple el conocimiento digital, la disponibilidad de dispositivos en diferentes territorios y los precios del servicio, que también se convierte en otro motor de inequidad en este ecosistema.
“Los próximos espacios públicos de wifi para la ciudadanía deben ir acompañados de tecnologías de first party data, que son aquellos datos que se pueden obtener de primera mano a través fuentes propias como la página web, las redes sociales, el CRM, entre otros, puesto que el futuro de la accesibilidad, de los programas públicos y de la opinión popular dependerá también de cuánto las entidades tienen información de la población por la que trabajan”, señaló.
Cabe recordar que tanto la Organización de las Naciones Unidas (ONU) como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) establecieron que el acceso a internet es un derecho del hombre y, por lo tanto, los gobiernos deben instar en garantizar la conectividad de forma equitativa, asequible y de calidad adecuada, cumpliendo con los principios de pluralismo y no discriminación. En consecuencia, es indiscutible el resaltar que el wifi es y será la clave del cambio social en los próximos años.
Seguir leyendo: