El pasado 4 de enero, el mundo del teatro experimentó una de sus más grandes pérdidas con el fallecimiento del prolijo dramaturgo Juan Monsalve. Su partida a los 72 años de edad en la ciudad de Bogotá tomó por sorpresa a quienes le rodeaban, pues siempre se le vio con energía y firmeza.
Según información obtenida por Infobae a través del Teatro de la Memoria, Monsalve tenía un buen estado de salud. Sin embargo, sufrió un infarto, según comentarios de los médicos.
Juan Monsalve deja al país un compilado de más de 50 obras de teatro y una gran colección de investigaciones en la escena del teatro en Colombia que transitan por diversos lenguajes, donde encontramos principalmente los rituales, lo no verbal y la memoria, un eje fundamental para el dramaturgo y que lleva el nombre de una de sus más grandes creaciones, el Teatro de la Memoria.
Entre sus obras de teatro más destacadas y que fueron llevadas a la escena, encontramos: Los mendigos, El tigre y el venado, La historia del príncipe Chi, El huso de la nacencia, El pescador y La casa en el aire. Sin embargo, una que también pasará a la historia es Hija de..., obra que representa junto a su hija.
Es importante recordar que Monsalve deja al país, y al mundo, un aporte sumamente importante para el desarrollo del arte teatral. Su legado en el área investigativa es uno de los más trabajados y reconocidos, procesos que realizó con base en sus propias experiencias y exploraciones a nivel nacional e internacional. Esto le permitió comunicarse con otras formas de hacer teatro que nutrieron su formación.
El director de teatro y escritor, Sandro Romero Rey, también lamentó la partida del maestro Monsalve e hizo un sentido homenaje a través de un escrito que publicó en su cuenta de Facebook donde resalta la esencia del teatro recopilado y difundido por el dramaturgo:
“Ha muerto uno de los nombres emblemáticos del teatro colombiano. Juan Monsalve fue el símbolo de una actitud contestataria, de viaje a las raíces, fundador de tradiciones y reconstructor de sombras. (…) Viajar con Juan Monsalve y su gesta vital es reconocer en él su labor de ingeniero, de aquel que tendió los puentes para comprender India, Bali, China, Japón, Dinamarca, Italia, entenderlos a la luz de la compleja tradición de las teatralidades de América Latina y de ese lugar caótico y feliz que se llama Colombia”. —Escribió Romero.
Su hija, Sofía Monsalve, creció en el mundo de las tablas luego de que tuviera contacto con él a los 4 años, momento en el que inició su carrera como actriz. De la mano del teatro, Sofía termina su carrera académica como Antropóloga en la Universidad Sapienza de Roma, sin soltar a los maestros que conoció y que fortalecieron su camino. Así, se convertiría en la sucesora de este espacio que sigue fortaleciendo la llama del teatro colombiano y que ya dirigía junto a su padre.
Por ahora, el Teatro de la Memoria informó a través de sus redes sociales que el dramaturgo será velado este 6 de enero en la Funeraria La Candelaria. La imagen difundida también hace un llamado a quienes asistan para que vistan de blanco y así, rendir homenaje a su vida y obra.
Monsalve y el Teatro de la Memoria
Fundado en el año 1989 en Villa de Leyva, Colombia, el Teatro de la Memoria se ha reconocido principalmente por su aporte investigativo, creativo y formativo. De ahí que se le conozca como un centro de investigaciones de las artes escénicas, además de ser considerado pionero de la Antropología Teatral en el país.
La búsqueda e interés del dramaturgo por conocer las fuentes originales de la representación en las fiestas, ritos y demás manifestaciones culturales, han hecho de su trabajo y obra, un prestigioso espacio que pone en diálogo lo ancestral con las nuevas estéticas. Sus obras, escritas y puestas en escena, también dan cuenta de un proceso que integra la música en vivo, las artes plásticas y la danza. Sin embargo, su rasgo titular fue y ha sido la creación colectiva.
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