Este jueves 5 de enero, el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane) informará al país cuál fue la cifra con la que cerró el índice de precios al consumidor (IPC) o inflación durante el 2022.
Colombia lleva cerca de 20 meses consecutivos con incrementos en los precios y por eso los expertos proyectan que la inflación cierre 2022 alrededor del 12,6 %, siendo una de las más altas en términos anuales desde inicios de 1999.
La buena noticia es que a partir de enero y febrero hay una buena posibilidad de que la inflación empiece a ceder un poco e interrumpa esta racha de incrementos consecutivos, porque se experimentará una normalización en el ajuste de los precios.
Los precios de los alimentos durante enero y febrero de 2022 crecieron más allá del 2 % y para 2023, si bien se espera que suban de precio, lo harán a una tasa inferior, y muestran un punto de inflexión en esa inflación acumulada de 12 meses.
De igual manera se ve que ante un entorno de moderación en la actividad económica es probable que las indexaciones a los precios sean altas, pero en el margen un poco más moderadas, lo que también contribuye a tener algo de disminuciones en la tasa de inflación.
Con lo anterior, tras haber conocido la subida de tasas de interés de diciembre por el Banco de la República, es probable que este ciclo de subidas se extienda hacia enero, una subida que podría ser la final del ciclo de incrementos. Sin embargo, no se espera que las discusiones de recorte de tasas de interés se den muy temprano en el año, se permanecería con tasas de interés altas probablemente hasta el segundo semestre de 2023.
Normalización
La economista de Scotiabank Colpatria Jackeline Piraján afirmó que después de la pandemia del covid-19 se inició un proceso de normalización de varios precios que estuvieron congelados por la enfermedad, pero con una economía que crece mucho y con choques internacionales, como la guerra Rusia-Ucrania, y se vio que desde abril del 2021, y de manera consecutiva, Colombia enfrentó un incremento de la inflación bastante marcado al pasar de inflaciones inferiores al 2 % a hablar de inflaciones superiores al 12,5 %.
“Eso ha impactado bastante las decisiones de los agentes. Eso impactó el incremento del salario mínimo y también podría impactar el empleo. En términos absolutos, Colombia se enfrenta a las tasas de inflación más altas desde casi inicios de 1999″, precisó Piraján.
Anotó que para 2023 se espera que la escalada de precios se interrumpa cuando se conozcan los datos de la inflación de enero. Además, se cree que si bien en 2023 los precios siguen al alza no podrían hacerlo en la misma magnitud o en una magnitud superior a la vista durante 2022, lo que llevaría a enfrentar un tope de la inflación que oscile el 12,7 %, que es el estimativo.
“Las principales fuentes negativas para seguir esperando una inflación de promedio alta es pensar en las indexaciones o ajustes de precios de la inflación pasada o del ajuste del salario mínimo reconociendo que más del 60 % de la canasta familiar se afecta por esos precios. Por otro lado, el movimiento de la tasa de cambio, que afecta el precio de muchas cosas que se importan”, puntualizó.
Señaló que si bien a principio de año puede que se experimente un pico de inflación, en todo el promedio de 2023 la inflación oscilará alrededor del 10 % para al final del 2023 se cierre en 7,5 %.
El impacto de los fenómenos internacionales
El economista principal de Scotiabank Colpatria, Sergio Olarte, recordó que debido a la inflación a los bancos centrales les tocó, como en Colombia, subir las tasas de interés.
Subrayó que esa inflación, aunque sigue alta, ya empezó a desacelerarse. Sin embargo, advirtió que tiene un costo, que muchos país piensan que otros pueden entrar en recesión, lo que quiere decir que la actividad económica se puede contraer.
“Tenemos que estar pendientes de los mercados internacionales, de que China ya no produce tanto por la política cero covid, entonces la pasa mucho más mal o no. Que la guerra Rusia-Ucrania se volvió endémica, pero también produce que Europa no tenga la suficiente energía y eso puede hacer que el mundo se desacelera muchísimo”, alertó.
Dijo que eso hay que tenerlo en cuenta porque el mundo es el cliente de las exportaciones de Colombia y también proveedor de importaciones, así como las alzas de las tasas de interés de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed).
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