Distribuían galletas, postres y brownies de marihuana con la imagen de Pikachu: la banda fue desmantelada en Barranquilla

Pikalletas (galletas de marihuana), Árepika (arequipe de marihuana) y Pika brows (brownies de marihuana) son los productos insignia de la banda delincuencial capturada en Barranquilla este miércoles, 4 de enero, por la venta de alimentos con sustancias ilícitas a menores de edad.

Los ingredientes iban más allá de la marihuana y, aunque no son mencionados en el reporte oficial, también una larga lista de postres y gomas hacían parte de su catálogo.

Según indagaciones preliminares realizadas por la seccional Atlántico de la Fiscalía General, los productos eran comercializados en redes sociales, servicios de mensajería instantánea y entornos educativos.

Pero lo que más sorprende a las autoridades y padres de familia es la estrategia de marketing de la compañía. Utilizar música, mensajes y personajes caricaturescos para inducir a los niños, niñas y adolescentes a comprar y distribuir estupefacientes disfrazados como dulces, coloridos e inofensivos.

Los cinco capturados, identificados como Joaquín Emilio González Montiel, Mayra Alejandra Pacheco, Diana Montiel, Diana Valencia Ochoa y Luis Ángel Pacheco, recibieron medida de aseguramiento. Cuatro de ellos en establecimientos carcelarios y tan solo uno en la modalidad de casa por cárcel.

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Imputados por los delitos de tráfico, fabricación/porte de estupefacientes agravado, destinación ilícita de muebles o inmuebles, suministro a menor, estímulo al uso ilícito y concierto para delinquir agravado.

Todo esto, luego de conocerse que entre sus clientes estarían los cinco niños de un colegio al norte de Barranquilla que, en abril del año pasado, resultaron intoxicados con golosinas ilícitas.

Según el último Estudio Nacional de Consumo de Sustancias Psicoactivas en Población Escolar, publicado en 2016, en Colombia el 7% de los niños, niñas y adolescentes menores de 14 años han probado la marihuana alguna vez en su vida o lo hacen como una practica habitual.

Lo que puede parecer poco, pero, por aquel entonces tenía a casi 7 mil infantes ingresados en el programa de restitución de derechos por consumo de sustancias psicoactivas del ICBF.

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Y en cuanto al uso de sustancias que pueden comercializarse de manera legal, las cifras son aún más aterradoras, 24,3% de los niños en edad escolar admiten haber fumado alguna vez. Mientras que el 10% aún lo mantienen como un hábito.

Y dos de cada tres menores declararon haber consumido alcohol en el último mes, estando un 13% de ellos entre los 11 y los 12 años.

Mucho se ha dicho sobre el consumo de marihuana en la actualidad. Los pequeños expendedores y consumidores de cannabis suelen argumentar que, al ser un producto de origen natural, sus efectos en la salud de una persona son nulos.

Pero, recientemente, una serie de estudios publicados en distintas revistas de psicofarmacología, indican que el consumo de marihuana en personas que no han terminado de desarrollar su cerebro por completo podría generar afectaciones cognitivas y psicológicas a largo plazo.

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