La Asociación Amigos de los Autos Antiguos, organizadora de este tradicional desfile en el marco de la Feria de Cali, anunció que no volvería a realizar este certamen tras los hechos presentados en la última edición.
Debido a problemas logísticos y de seguridad que se originaron por el presunto incumplimiento de la Corporación de Eventos Ferias y Espectáculos (CorfeCali) con los acuerdos establecidos para la organización de este evento, los asistentes al certamen y también las ‘reliquias’ que transitan en el mismo, estuvieron en riesgo.
El desfile, también denominado ‘La huella de un motor’, tiene como propósito enaltecer parte del patrimonio de la ciudad, recordando los vehículos que circulaban por las calles del Cali viejo. Cabe mencionar que este es el único evento de la Feria de Cali que se hace con un fin social, ya que todo el dinero recaudado se dona al Ancianato Cotolengo de la capital vallecaucana. Esta donación beneficia a cerca de 400 adultos mayores.
Uno de los organizadores del evento manifestó su inconformismo por la logística que aportó la ciudad y señaló que por esta razón el desfile dejaría de realizarse en las próximas ediciones.
“Hay un descontento muy grande con Corfecali porque incumplió con los compromisos adquiridos. La responsabilidad que asumió esta entidad era poner vallas de seguridad a lo largo del desfile para evitar que el público se metiera dentro del recorrido; sin embargo, esto no se hizo y se puso en riesgo la integridad de las personas. Hubo varios accidentes”, comentó Rodrigo Sarasti, director del desfile, en declaraciones recogidas por El País.
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A propósito del recorrido de estos automóviles, este atraviesa la Autopista Suroriental con Transversal 29, en el sector de Comfandi El Prado, luego pasa por la Carrera 39, donde se debe girar con dirección a la Avenida 9, sentido norte, para tomar la Calle 7 y finalmente llegar al Parque de la Alameda. En esta edición, más de 220 vehículos de colección y exhibición hicieron parte del desfile.
Sarasti comentó que en esta edición se tenía preparada una presentación de vehículos que provenían de otras partes del país y que el desorden impidió, en primer lugar, disfrutar de estas ‘joyas’ y en segundo, las aglomeraciones hicieron que los vehículos sufrieran algunos daños.
“El desfile al final fue todo un fracaso, así lo que se haya visto en televisión fuera muy bueno. Pero la gente terminó aglutinándose en las calles, lo que, repito, causó varios accidentes, además de carros que terminaron rayados y afectados por el público”, mencionó.
La Feria de Cali concluyó exitosamente en materia económica gracias al recaudo que generan tanto de los residentes de la ‘sultana del valle’, como los turistas que visitan la ciudad; sin embargo, la organización de algunos eventos no se desarrolla con las mejores condiciones y estas es la queja que manifiesta Sarasti.
“Los vehículos que salieron fueron absolutamente especiales, de coleccionistas que llegaron de muchas partes de Colombia, quienes decidieron no volver a salir porque el señor Argemiro Cortés, director de Corfecali, no puso las vallas de seguridad, que era un compromiso adquirido con anterioridad”, sentenció el director de la organización.
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